“Yo creo que la asociatividad es todo, porque al final juntos somos mucho más fuertes, en especial en el contexto de pandemia que vivimos”. Con estas palabras, Javier Zamora, presidente de la Cooperativa Campesina de Cultivos Andinos Petorquinoa, grafica lo crucial que significa para el desarrollo y crecimiento productivo de los agricultores el trabajo basado en el cooperativismo.
Precisamente la cooperativa Petorquinoa fue reconocida a fines del año pasado con la distinción “Héroes de la Alimentación, en la categoría “Innovación por la seguridad alimentaria”, que por primera vez otorgó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO.
Y luego de un año de adaptaciones y reinvenciones para enfrentar de buena manera los embates de la pandemia y sus efectos socioeconómicos, Petorquinoa continúa trabajando y ahora se apresta a cosechar su primera siembra colectiva de quínoa, en un predio comodato del CREAS (Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables), donde además instalaron una sala de procesos en la que pretenden concentrar en breve plazo el ciento por ciento de las etapas productivas de este grano ancestral.
Se trata de una agrupación de agricultores que nace el 2015 y que está integrada actualmente por 30 socios de distintas comunas de la Provincia de Petorca, el 70 por ciento de ellos usuarios INDAP del programa Prodesal y del Programa de Asesorías Técnicas (SAT).
Javier Zamora dice que pese a la falta de agua la siembra tuvo resultados positivos. “Ahora vamos a cosechar; el cultivo lo sacamos adelante con muy poquita agua que proveyeron 4 camiones aljibes de 10 mil litros que aplicamos con riego tecnificado”, comenta el dirigente, insistiendo en la importancia de la asociatividad para el mundo campesino. “Tenemos que organizarnos para acceder a herramientas para trabajar en conjunto. Al final somos los que alimentamos Chile y más aún en este contexto del Covid 19”, agregó Zamora.
Eje Estratégico
Petorquinoa es una de las 16 cooperativas campesinas activas en la Región de Valparaíso integradas por usuarios y no usuarios INDAP, que reciben apoyo de este servicio del agro en forma individual (usuarios) y también apoyo grupal a través de distintos programas de fomento.
Potenciar la asociatividad y el cooperativismo agrícola es uno de los ejes estratégicos del Ministerio de Agricultura que busca fortalecer las empresas asociativas campesinas, para que los agricultores puedan mejorar sus sistemas productivos, la comercialización de sus productos y avanzar en el desarrollo sustentable y económico de sus negocios agrícolas.
Otra de las agrupaciones formalizadas recientemente es la Cooperativa de Producción Limpia Pachamama, de la comuna de Quillota, proyecto de comercialización asociativo de hortalizas con la Empresa Merkén (concesionaria de JUNAEB) que actualmente integran 20 agricultores.
La agricultora Ana Ramírez, secretaria de esta cooperativa, asegura que “ninguno de nosotros podría haber participado individualmente del convenio que tenemos actualmente con JUNAEB. Para poder competir en el mercado necesitas estar asociado. Ha sido bueno, porque el grupo ha pasado por todo y estamos pendientes de lo que le pase a algún socio”.
En esto, confiesa, ha sido clave el Programa Asesoría Técnica Especializada y Gestor Comercial de INDAP, a través de un profesional que los ha apoyado en mejorar la comercialización de sus productos.
Los integrantes de la cooperativa Pachamama recientemente migraron del Programa Prodesal al Programa de Asesorías Técnicas (SAT) y ahora cuentan con asesorías especializadas con un consultor INDAP. “Hemos tenido ya dos o tres charlas de riego con un consultor SAT que han sido muy interesantes, aunque este año estamos quedando sin agua, nos estamos adaptando a esta nueva realidad, la mayoría ya tiene riego tecnificado para lo que hemos recibido apoyo de INDAP en proyectos de riego”, señaló Ramírez.
Hace pocas semanas la cooperativa Pachamama adquirió un camión con capacidad de 2 mil kilos, dotado de cámara frigorífica para mantener el frescor de las verduras, esto a través de aporte propio y crédito INDAP. “Ha sido ciento por ciento positivo habernos conformado como cooperativa”, concluyó la dirigente.
Otro ejemplo de trabajo asociativo es el que ha desarrollado un grupo de 21 agricultores de la comuna de Petorca que desde el 2019 conforman la Cooperativa Agrícola de Productores Lecheros y Crianceros de Ganado Caprino del Valle de Petorca Ltda., COLEP, que nació al alero de un proyecto de desarrollo rural que desde hace tres años ejecuta la ONG Progressio en convenio con INDAP y que esta semana inauguró una planta comunitaria de acopio y transformación de leche caprina en Chincolco, la que fue financiada a través de la Fundación Suiza de Asistencia Internacional – FAI.
Otras 13 organizaciones agrupadas como cooperativas están distribuidas en las provincias de Los Andes, San Felipe, San Antonio, Quillota, Valparaíso (Casablanca), Marga Marga y Rapa Nui.
Valle de Aconcagua
Otra de las agrupaciones que trabaja asociativamente en la región de Valparaíso es la Federación Regional de la Agricultura Familiar Campesina del Valle del Aconcagua, que nace al alero del Arzobispado de Valparaíso en 1992. La federación agrupa a organizaciones provinciales y comunales de la región y actualmente tiene alrededor de 300 socios.
“Esta es una instancia de representación de la agricultura familiar campesina. La idea nuestra es potenciar el desarrollo productivo tecnológico y comercial de la pequeña agricultura y que las organizaciones campesinas tengan presencia y los dirigentes puedan expresar sus demandas y propuestas a las autoridades”, dice el presidente de la federación Raúl Iturrieta, quien además es uno de los directores del Consejo Asesor Campesino de INDAP, CAR.
El dirigente destaca que la federación gremial ha contado con el apoyo de INDAP en diversas iniciativas. “Algo innovador fue que como no podíamos hacer talleres por la contingencia sanitaria, hicimos programas radiales con el objetivo de difundir los instrumentos y financiamientos de entidades como FOSIS, INDAP, Banco Estado y SERCOTEC, iniciativa que fue financiada a través del Programa Gestión y Soporte Organizacional PROGYSO de INDAP”, explicó.
Programas
En este contexto INDAP Región Valparaíso está trabajando en el fortalecimiento de las organizaciones campesinas a través de sus instrumentos de fomento y programas como el PAE, Programa de Asociatividad Económica, que busca desarrollar y fortalecer los negocios asociativos de empresas campesinas y el Progyso, Programa Gestión y Soporte Organizacional, además de otras acciones a través de proyectos de riego, inversiones y asistencia técnica, entre otros instrumentos.
“Dentro de nuestros lineamientos de trabajo como Ministerio de Agricultura a través de INDAP está el promover y fortalecer la asociatividad entre nuestros usuarios. Creemos que es la forma en que ellos puedan acceder a otros mercados, mejorar sus sistemas productivos y tener mejores oportunidades de negocio, para eso tenemos a disposición de los agricultores una serie de instrumentos que permiten apoyarlos en sus iniciativas articulados, además, con otras entidades públicas y privadas”, dijo el director regional de INDAP, Fernando Torregrosa.