Con el objetivo de revisar los protocolos y exigencias que se aplican a los barcos que realizan alije (trasiego de combustible de una embarcación a otra en un punto de fondeo), la Capitanía de Puerto de Quintero realizó una fiscalización de este proceso realizado por la empresa Copec en esa bahía, acompañado por el Delegado Presidencial para la Gestión de la Crisis Socio – Ambiental para las comunas de Concón, Quintero y Puchuncaví, Alejandro Villa, junto a equipos de la Superintendencia de Medio Ambiente y la seremi de Salud.
Se trató del traspaso de 10 mil m3 de diésel desde el buque tanque Maetinga – que traía el crudo desde el Golfo de México – al BT Puma (embarcación contratada por la empresa chilena, desde el 2019, para realizar la maniobra cada vez que llega combustible importado). La operación se realizó con el Sistema de Recuperación de Vapores (VECS, por su sigla en inglés), que consiste en el trasvasije mediante circuitos cerrados que evitan el escape hacia la atmósfera de los vapores que produce el proceso de intercambio entre buques.
El Capitán de Puerto de Quintero, Comandante Héctor Salgado, explicó que “este movimiento se realiza bajo altos parámetros y estándares de calidad, y de procedimientos de seguridad, para evitar la emanación de gases a la atmósfera, y dentro de ellos, está el Sistema de Recuperación de Vapores que se pudo ver en terreno. Ésta es una bahía especial, por ende, se necesita extremar las medidas de seguridad para evitar posibles focos de contaminación”.
La autoridad marítima continuó detallando que además de los formularios y permisos especiales que debe tener cada embarcación que realiza este procedimiento en esta bahía (más exigentes que los de otros puertos del país), se demandan otros protocolos: “Dentro de lo que ve la autoridad marítima, el movimiento se permite dentro de los parámetros de operación de esta bahía, es decir, de las marejadas y las condiciones de viento, pero también la autoridad sanitaria y la de medioambiente lo regulan dependiendo de los episodios críticos (GEC) que hay en la comuna y también a los episodios de mala ventilación. Así, en conjunto todas las autoridades pueden regular este tipo de actividades para evitar posibles focos de contaminación”.
Por su parte y tras presenciar la maniobra junto a las autoridades competentes, el Delegado Villa destacó que “pudimos observar una serie de protocolos que están en curso en el momento que ocurre este procedimiento, pero también se observan algunas recomendaciones que nosotros vamos a conversar con los distintos actores de la bahía que operan en este tipo de protocolos”.
Agregó que “esto es una actividad estratégica para el país y estamos en una zona especial. Eso significa que la vigilancia que se debe hacer en esta bahía es particular. Sin duda, pudimos notar que acá se redoblan las condiciones de protocolo y vigilancia en el contexto de que estamos en presencia de una actividad muy intensa de transferencia de descarga de combustible. Recordar que estamos en un territorio contaminado y particularmente por emisiones hacia la atmósfera. Entonces, en esta actividad que tiene que ver con descarga de hidrocarburos que generan en algún momento la presencia de gases, lo que vimos hoy en los buques de Copec fue cómo se capturan el 100% de estos gases que operan dentro de los estanques”.
Cabe destacar que la maniobra de alije permite descongestionar la bahía de Quintero, lo que genera menos riesgo para la población, ya que disminuye la cantidad de buques a la gira, es decir, que quedan fondeados a la bahía.