Gatos asilvestrados, roedores, cabras, moras, maquis y murtas, entre otras especies exóticas invasoras, han ocasionado un grave daño ecosistémico en la isla Alejandro Selkirk, en el archipiélago de Juan Fernández, al depredar o usurpar territorio a la avifauna y la flora endémica de la zona, que registra poblaciones de aves y plantas únicas en el mundo.
Para entregar una solución a esta problemática, profesionales de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y la ONG Island Conservation trabajan en la confección de un completo plan de restauración ecológica, que permita el control de las especies introducidas y reforzar las barreras de bioseguridad en la frágil localidad insular.
Al respecto, el director regional de CONAF, Héctor Correa, explicó que la iniciativa “se encuentra en etapa de planificación y diseño, de difusión a otras instituciones relacionadas y a la comunidad isleña. El objetivo, en este punto, es que los actores involucrados conozcan las medidas que se pretenden implementar, y que puedan expresar sus opiniones y sugerencias, ya que esta información será analizada e incorporada en el proyecto”.
Su par del SAG, Marco Tapia, sostuvo que el servicio que representa “está muy motivado y proactivo en cuidar y resguardar el rico ecosistema que se genera en torno al archipiélago de Juan Fernández, particularmente en la isla Alejandro Selkirk. Con CONAF estamos trabajando de manera muy coordinada, a fin de concretar acciones que nos permitan informar a la comunidad sobre los productos que son riesgosos para la biodiversidad de los territorios insulares”.
En tanto, el director regional del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), Marco Arredondo, resaltó el respaldo que como organismo brindarán para el éxito de la iniciativa interinstitucional. “Estamos trabajando en la caleta que existe en la isla Alejandro Selkirk, y desde ahí tenemos un desempeño que nos relaciona con todo este intercambio que se produce y que tiene relación con la prevención del ingreso de especies invasoras, ya sean vegetales o animales, y también tenemos directo contacto con la comunidad de pescadores, que es a la que podemos convocar para que se sensibilice con estos temas”.
Permisos y bioseguridad
En la misma línea, la jefa de la Sección de Conservación de la Diversidad Biológica de CONAF Valparaíso, Javiera Meza, enfatizó que “nos interesa mucho que participe la comunidad isleña, los pescadores de langostas y los servicios con sede en la isla Robinson Crusoe. Por lo tanto, próximamente formaremos una mesa de trabajo con ellos, para que el municipio, el Comité de Adelanto de la Isla Alejandro Selkirk, SAG de la zona, la Gobernación Marítima y Carabineros, apoyen todas las medidas de este proyecto de restauración que quiere recuperar las poblaciones de fardelas, especies de flora en peligro de extinción y los ecosistemas en general, para evitar nuevas extinciones”.
“Este es un proyecto a largo plazo, estamos en la primera etapa, de planificación, para contar con todos los elementos y permisos, por ejemplo, para ocupar algunos químicos anticoagulantes de uso habitual en el continente para la eliminación de roedores”, añadió la experta.
Finalmente, la encargada regional de Recursos Naturales del SAG, Aurora Espinoza, recalcó que el éxito del proyecto multisectorial de restauración ecológica depende no solamente de la erradicación de las especies exóticas invasoras, sino que también de la implementación de un sistema de bioseguridad efectivo, tanto en la isla Alejandro Selkirk como en Robinson Crusoe.