Más de 14 mil consultas recibió la Superintendencia de Educación, a nivel nacional en los seis primeros meses de funcionamiento del Sistema Integral de Atención Ciudadana (SIAC), centro de contacto telefónico y web, destinado a responder en línea las inquietudes de la comunidad escolar a nivel nacional. Del total, 3.878 (27,4%) corresponden a dificultades en materia de convivencia escolar a nivel nacional.
En la región de Valparaíso, el panorama no fue tan distinto, ya que hubo hasta noviembre de 2017, 1.478 denuncias de las cuales 635 corresponden a maltrato a estudiantes, 137 a medidas disciplinarias y 86 a no renovación o cancelación de matrícula. Le siguen Discriminación y Local o Infraestructura del establecimiento educacional no cumple con la normativa (con 80 y 76 denuncias respectivamente).
El Director regional de la entidad fiscalizadora, Pablo Mecklenburg, estas cifras que lideran el ranking de preocupaciones de los apoderados tiene que ver con antecedentes de tiempos anteriores “con maltrato a estudiantes, medidas disciplinarias y eso hace referencia a medida disciplinaria mal aplicada, digamos, a juicio del denunciante, no necesariamente son mal aplicadas, no renovación y cancelación de matrícula, que empieza a crecer en esta época del año, por razones obvias y evidentes y aquellas por las cuales los papás acusan discriminación y quiero decir que no necesariamente todo lo que se denuncia como discriminación es discriminación, por eso hay un proceso de investigación, proceso de fiscalización y si se constituye la falta, recién pasamos a la etapa de sanción administrativa y sanción al colegio”
En la categoría referida a denuncias en materia de convivencia escolar son un total de 1.068 las denuncias que desglosan en: maltrato a estudiantes, medidas disciplinarias, no renovación o cancelación de matrícula, discriminación, accidentes escolares, agresiones sexuales maltrato a docente y/o asistente de la educación y por último dificultades o impedimentos en la constitución o participación de Centros de Alumnos, Centros de padres y Consejos Escolares.
En materia de maltrato los relatos dan cuenta de la preocupación de los padres y apoderados ante casos de hostigamiento hacia sus hijos e hijas, agresión, amenazas, amedrentamientos, bullying, burlas y golpes, entre otras, junto a solicitudes de orientación sobre la normativa educacional y protocolos para enfrentar estas prácticas.
Al respecto, Mecklenburg considera importante relevar que las denuncias en el servicio han aumentado en un 20% el 2017 con respecto al mismo período en 2016 (Enero-Noviembre), sin embargo, eso obedece a 2 fenómenos importantes que se cruzan el uno con el otro, “uno efectivamente la Superintendencia, Progresivamente en el tiempo, hay que pensar que este es un organismo nuevo, se está haciendo conocido en los integrantes de las comunidades educativas, por lo tanto hay más gente que recurre a ella porque la conoce, pero por otro lado, también está el fenómeno que ciertas cosas que ocurrían antes dentro las escuelas, eran naturales, estaban naturalizadas y aceptadas por los integrantes de la comunidad educativa y hoy hemos dado un paso adelante en los derechos de los integrantes de esta comunidad educativa y por lo tanto, no se toleran cosas que en tiempos pasados si se toleraban y por lo tanto eso también incrementa el número de denuncias”.
Casi en el mismo nivel de preocupación respecto del maltrato figuran el maltrato psicológico de adulto a alumno o alumna con 238 denuncias y el maltrato físico entre alumnos con 213 casos denunciados.
Por otra parte, el número total de mediaciones recepcionadas durante el presente año corresponde a 248, de las cuales el 87% se encuentran cerradas y el 13% restante en proceso activo.
Finalmente, Mecklenburg recomienda siempre que el mecanismo más confiable para las denuncias de estos casos es la web de la entidad www.supereduc.cl, “ahí van a encontrarse con los canales para denuncias consultas y para tener respuestas a sus requerimientos, pero siempre, primero, es la dirección del colegio, porque lo que tenemos que lograr es que las comunidades educativas, tengan y construyan y desarrollen capacidades y herramientas para resolver los conflictos normales que se van a dar, en aquellos lugares donde por muchas horas conviven por muchas horas, eso es de naturaleza humana, lo importante es que la escuela sepa resolver los conflictos, no que no existan, es impensado que no existan. Si la escuela no reacciona, la Superintendencia es el paso que tiene que dar (…)”