Un total de 56 observaciones con diversas irregularidades detectó la Contraloría General al auditar la gestión la Municipalidad de Viña del Mar de los últimos años.
El informe final N° 577 menciona los resultados de la fiscalización al sistema de información, endeudamiento y un examen de cuenta de los saldos de ingresos y gastos al 31 de diciembre de 2017. El preinforme, de septiembre de 2018, arrojó un total de 93 observaciones, no obstante la Contraloría destacó que el servicio acompañó información que permitió dar por superadas 12 de estas y adoptó medidas para hacer frente a otras 25 observaciones.
Entre los cuestionamientos que no fueron subsanados figura que el municipio incurrió en un déficit ascendente de $17.585.250.174 en la ejecución presupuestaria al 31 de diciembre de 2017, incumpliendo con ello el principio de la legalidad del gasto.
Además, se verificó que en las cuentas públicas de 2015 y 2016 se informa un superávit en la gestión, mientras que en 2017 se dio a conocer un déficit. No obstante, todo lo anterior difiere de los antecedentes entregados por el Director de Control del municipio.
Otra objeción señalada es que al 31 de mayo 2018, la municipalidad contabilizó y pagó facturas por $9.583.743.047 y que devengó otras por $1.776.431.513, en circunstancias que todas ellas correspondían a bienes y/o servicios recibidos en 2017.
Igualmente, se confirmó que el municipio adeudaba 25 facturas por $ 336.683.538 a cuatro proveedores, sin que estas se encuentren pendientes en los registros de la municipalidad. Asimismo, se estableció que si la municipalidad hubiera registrado su deuda al término del ejercicio presupuestario 2017, pudo haber advertido la existencia de gastos devengados superiores a los límites definidos en el presupuesto.
Ejecución presupuestaria
En la fiscalización también se constató que, al menos desde 2015, diferentes directores de control dieron a conocer a la alcaldesa y al Concejo Municipal que parte del déficit presupuestario se debía a deudas no reconocidas ni pagadas oportunamente. Incluso, la CGR estableció que el presupuesto inicial de 2017 no contempló el déficit, pese a que las autoridades ya contaban con dicha información.
En cuanto a la ejecución del presupuesto, se determinó que en 2017 el municipio gastó $ 5.540.515.128 en horas extraordinarias, que se suman a otros $ 7.077.259.529 en pagos por honorarios y programas comunitarios. Ambas cifras completaron $ 12.617.774.657, equivalentes al 43,20% del total de gastos de personal de ese municipio y un 14,93% del total de gastos del presupuesto municipal. Al respecto, la CGR advirtió que ambos montos superan lo que el municipio reservó para la materialización de proyectos, consultorías y obras civiles, cifra que llegó a $ 3.775.106.785, equivalentes al 4,47% del presupuesto municipal.
La Contraloría señaló que el municipio destinó $ 20.260.862 en honorarios respaldados con informes que son similares entre un mes y otro, sin indicar fechas, lugares u otro antecedente que permita demostrar fehacientemente la realización de las actividades detalladas. Además, el municipio desembolsó $ 35.709.773 a la empresa PROEXSI Ltda., por el módulo Inspección Municipal pese a que este no fue instalado.
Otra observación se vincula a la reparación del reloj de flores de la ciudad. Se comprobó que la entidad edilicia cedió 887 plantas, costeó $ 22.435.363 para ornamentación y retiro de escombros; y compró $2.691.780 en 3.200 especies florales. Todo ello fue entregado a la empresa Siglo Verde S.A., pese a que la responsabilidad de mantener y reponer las especies es de la concesionaria. Igualmente, se evidenció el pago de $ 64.473.910 a la empresa González y Fierro Ltda. por siete trabajadores, sin que se hayan verificado las labores ni los lugares donde estos se habrían desempeñado.
Además, el municipio gastó $ 1.044.915 en alojamiento y alimentación para los artistas que participaron en la celebración del “Año Nuevo Chino 2017”, siendo que las municipalidades no están facultadas para utilizar fondos en este tipo de situaciones. A ello se suma el desembolso de $2.503.901 a las empresas Piamonte S.A. y Rene Godoy y Cía. Ltda., por el uso del dispositivo TAG en las autopistas Vespucio Norte Express S.A., Autopista Central S.A., Costanera Norte S.A. y Vespucio Sur S.A., sin que exista detalle de los vehículos que utilizaron tales vías.
Pago de horas extraordinarias
Adicionalmente, mediante una visita inspectiva, se determinó que el 11 de julio de 2018, entre las 21 y 23:10 horas, hubo personal municipal que no fue habido en sus puestos de trabajo. No obstante, en el sistema de control horario figuran con una salida posterior a la señalada.
En esa línea, la CGR igualmente cuestionó que un funcionario contratado a honorarios por el municipio, sin horario establecido, también fue contratado por las empresas González y Fierro Ltda. (de 8 a 17:30 horas, con posibilidades de realizar horas extraordinarias) y Alto Jardín S.A. (de 18 a 0 horas), registrando salidas en González y Fierro Ltda. que le impedían cumplir con el contrato que tenía con Alto Jardín S.A. Pese a lo anterior, el municipio pagó por los servicios contratados.
Por las irregularidades detectadas, la CGR instruirá un sumario y ejecutará un reparo por $150 millones aproximadamente. En paralelo, se derivarán los antecedentes sobre pagos indebidos al Ministerio Público. Todo ello se suma a los sumarios ya iniciados por la propia entidad edilicia y de los que deberá informar a la Contraloría.
Fuente: contraloría.cl