Trabajadores del transporte en Placilla denuncian indignas condiciones de trabajo: la garita no tiene agua potable ni baño.

Durante este martes, la consejera regional Nataly Campusano se reunió con dirigentes del sindicato de micros de las líneas 402 y 406, que denuncian las paupérrimas condiciones con las que actualmente están trabajando.

Dentro de lo que la Core pudo constatar son la falta de agua potable para los baños, de los cuales dos de los tres que hay funcionan, para un total de 70 trabajadores; agua del pozo que no es apta para el consumo humano y un casino y comedor que no da abasto, pues cuentan con solo dos mesas.

Ante los hechos, el presidente del sindicato de trabajadores Eduardo Guerra, culpa a la empresa pues “no nos tienen las condiciones mínimas para poder trabajar tranquilos.”, ante lo cual decidieron contactarse con Campusano.

“Las actuales condiciones de los trabajadores es una expresión de la política que tiene en decadencia el ámbito del transporte, que lo hemos dicho reiteradas veces”

Otro hecho que denuncian los dirigentes es la persecución por parte de la empresa de transportes, en especial de Reinaldo Sánchez, propietario de la línea de buses que hoy se ven afectados, pues se han visto amedrentados.

Sergio Mondaca, tesorero del sindicato denuncia: “Estamos siendo amedrentados, amenazados de que vamos a dos turnos si no tenemos sueldo.” Y agrega “Si uno no hace la cuota ellos lo castigan, me van a castigar a mí también, dándome dos vueltas diarias, donde la plata no me alcanzaría para nada.”

Campusano también responsabiliza a la empresa, pero para ella quien debe hacerse cargo de estas denuncias es el Seremi de Transporte, pues dice que es una expresión más de “ejercer de forma adecuada sus funciones en el ámbito de fiscalizaciones.”

Para la consejera, Gerard Oliger tiene una responsabilidad de que “existan trabajadores del transporte que estén en una situación laboral sin servicios higiénicos, sin agua potable, rodeados de basura y con un miedo importante a enfrentar los abusos, en este caso, con su empleador”

Además agrega que la falta de licitación al transporte público lo que sigue siendo un tema no resuelto por parte del Seremi, pues ha demostrado “la poca voluntad de las autoridades, en orden a iniciar un nuevo proceso de licitación, que no solo afecta a los usuarios, sino también a los trabajadores del transporte público”

Pero no solo a Oliger es quien debe pronunciarse, señala Campusano, sino que es el momento para que el Intendente, Jorge Martínez “tome cartas en el asunto y comience a tomar decisiones, pues este parece ser solo un ejemplo de los sinnúmeros problemas que tiene el gremio y lo que hoy día está enfrentando el transporte público.”

“Creo que es importante al momento de hablar de una nueva licitación estén los mínimos. Esos mínimos son que se puedan garantizar los derechos básicos de los trabajadores del transporte, donde pudimos evidenciar que fácilmente se están vulnerando en esta garita, como también la calidad hacia el mundo de los usuarios”

“Creo que ahí es importantísimo que las autoridades competentes de la cartera, como también la autoridad local más importante que es el Intendente tengan declaraciones tajantes para que podamos tener un transporte público transparente.”