Con el objetivo de reforzar el suministro en diversos sectores de Viña del Mar, además de abastecer a 1.200 hogares del campamento “Manuel Bustos”, Esval inició la ampliación de su planta elevadora de agua potable Villa Independencia, además de la construcción del nuevo estanque Rukán. Estas obras, que tienen una inversión que supera los $2.500 millones por parte de la sanitaria, beneficiarán a más de 32.000 habitantes de la comuna.
La Secretaria Regional Ministerial, Evelyn Mansilla, destacó que estas obras son muy esperadas por los vecinos del lugar. “Estamos felices por este avance, hemos trabajado arduamente con los vecinos para poder materializar este sueño que comienza a ser realidad. Este nuevo estanque semienterrado tendrá una capacidad 2 millones 500 mil litros y nos permitirá reforzar el suministro de 27 mil habitantes. De esta forma, tal como nos lo solicitó el Presidente Sebastián Piñera, estamos avanzando y generando mejores condiciones de vida para construir el Chile que queremos”
Para el director regional de SERVIU, Tomás Ochoa, “lo que está haciendo Esval es muy importante porque es la primera obra necesaria, que es contar con un estanque de agua potable. Nosotros iniciamos el cambio de matrices durante el año pasado y este fin de semana, publicamos el llamado de licitación de la primera etapa de urbanización. Esta es la etapa que se conoce como ‘1-A’, que es de la parte más baja del campamento, donde las primeras 120 familias van a contar con agua potable y alcantarillado. Por eso era muy importante este estanque, porque vamos a poder abastecer, para continuar después con las etapas que vienen y así tener un campamento urbanizado. Este es un muy buen ejemplo del trabajo entre el sector público, los vecinos del campamento y la empresa privada, que nos va a permitir dar una mejor calidad de vida a tantas familias que han vivido durante años en condiciones muy precarias”.
“Este proyecto permitirá concretar un anhelo muy esperado por la comunidad del campamento Manuel Bustos, con cerca de 5.000 habitantes que contarán con un suministro continuo y de calidad, de forma progresiva durante los próximos años. Además, estamos reforzando nuestro servicio para miles de familias de las villas Independencia, Arauco y Rukán, entre otras. Sabemos la importancia que tiene el agua para la vida diaria de las personas y por ello, estamos trabajando en conjunto con las autoridades y la comunidad en seguir impulsando el acceso universal al agua potable, además de trabajar día a día por la mejora continua del servicio que entregamos a nuestros clientes”, dijo el subgerente Zonal de Esval, Alejandro Salas.
“Tener agua potable es muy importante para nosotros”
María Medina, dirigenta del campamento “Manuel Bustos”, manifestó que “estamos muy contentos porque hemos ido avanzando paso a paso, viendo muchas cosas materializadas como este hito de poder contar con el agua potable, que es muy importante para nosotros. Es fruto del esfuerzo de los dirigentes y también de las autoridades que han podido gestionar una solución”.
A su vez, María Tapia, presidenta del comité “Villa La Pradera” -uno de los 22 que forman parte del campamento-, expresó que “estoy feliz de que llegue el agua potable a nuestras familias, hay muchas zonas que están sin el recurso y para nosotros es un privilegio. Que en un futuro podamos abrir la llave y que salga el chorro de agua es muy emocionante para todos. Le damos gracias a las autoridades que han estado en este proceso y también a Esval, que puso los recursos para realizar estas obras”.
Las obras tienen prevista su entrega para mediados de 2020 y a partir de esa fecha, las familias que cuenten con su vivienda regularizada en esta etapa, podrán iniciar el proceso para conectarse a la red de agua potable de Esval.