Tiempo de escucha activa, de diálogo y reflexión. Tiempo de ponerse en el lugar del otro y de contener. Es el rol que la Universidad de Playa Ancha, en sus distintas facultades, ha adoptado en estos días de convulsión social, realizando encuentros con estudiantes y funcionarios para conocer qué piensan de la situación país y cómo lo están viviendo.
Es lo que ha estado realizando el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior, PACE, que se reúne con estudiantes de distintas carreras para generar un espacio de acompañamiento psicosocial y emocional.
“Un poco para saber cómo estaban, para hacer la contención y conocer qué está sucediendo con ellos. Entonces, la primera pregunta fue cómo percibieron, dónde estaban cuando todo esto vino, cómo lo sentiste, cómo está repercutiendo esto en tu vida privada, era muy importante saber. Y esto nos permite levantar información para ir programando las próximas sesiones”, sostuvo la docente a cargo de las Tutorías Par, Margarita Badilla.
La jornada permitió aplicar técnicas de liberación emocional de Gary Craig, a través de la estimulación manual de puntos del cuerpo que favorecen la circulación de la energía. Es la técnica conocida como tapping, que ocupa golpes suaves que se da la misma persona en distintas partes del cuerpo, llamados también puntos de acupuntura. El propósito, explicó la Terapeuta en Técnicas de Liberación Emocional y Matrix Reimprinting, Sandra Pizarro, fue identificar las emociones que están perturbando a los estudiantes, para liberar bloqueos y dejar ir la ansiedad, la rabia o el miedo que han sentido en exceso, convirtiéndose en un estado de ánimo.
Igualmente, Pizarro trabajó la técnica de cambiar en la mente imágenes asociadas a eventos que perturban, por otras deseadas en la misma situación, lo que impacta en el recuerdo del evento y, por tanto, en el ánimo, la salud mental y física, al liberar síntomas ocasionados por el recuerdo perturbador.
Les duele el individualismo
En la ocasión, la profesora de Filosofía y orientadora vocacional del PACE UPLA, Susana Parrao, observó en los participantes una posición y convicciones similares. “Observé emociones en común bien diversas, que tienen que ver con esperanza, con sueños de justicia, pero al mismo tiempo con miedo, con frustración, incertezas y preocupación de lo que va a pasar en el futuro. El individualismo es lo que más les choca y duele de su entorno, y creo que es valioso que los estudiantes estén pensando y criticando esos valores que han estado tan arraigados en la sociedad, particularmente el individualismo, que nos hace separarnos de las personas y no pensar en las necesidades y en el valor que tiene el otro y la otra”.
El estudiante de Pedagogía en Artes Plásticas, Jhonatan Burgos, compartió con los presentes que ese 19 de octubre recorría los cerros de Valparaíso con un amigo y los pilló de sorpresa el estallido social. “Sabíamos que habría marchas, pero no pensábamos que iban a salir los militares a la calle, tampoco pensábamos que Carabineros empezaría a reprimir. Nosotros estábamos en un hostal y sentía angustia, veía en la televisión lo del toque de queda y decía pero cómo, si estamos en democracia. Esto no lo pensaba vivir, era como lo que había visto en los libros. Estuve muy intranquilo, porque no sabía si iba a poder llegar a mi casa (Quillota). Ahora me siento un poco más tranquilo y más consciente de lo que yo vivo, de lo que vive el otro y de las cosas que podemos compartir”.
Al finalizar el encuentro, la estudiante de Psicología, Jocelyn Carvajal, agradeció el espacio brindado. “Por parte del Pace es muy interesante que nos tengan en cuenta y que se vea este apoyo a todos, porque creo que lo necesitábamos. No nos sentimos solos. Es bueno saber que habrá alguien que nos va a apoyar y que está pendiente de nosotros. Creo que esto es muy bueno para saber que lo que yo siento no solo es mío, sino que también es algo que otras personas han sentido. Es importante conocernos y reconocernos”.