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Un dramático llamado de alerta realizó el director de la Fundación Refugio de Cristo, padre Enrique Opaso, tras el robo ocurrido el pasado fin de semana en una de las bodegas del hogar Santa Teresa en la ciudad de La Cruz. Los delincuentes, forzaron uno de los candados, procediendo a llevarse equipos informáticos recién comprados, todos los uniformes nuevos de las niñas del hogar, más otros insumos.
“No podemos entender por qué se ensañan con una fundación, que con mucho sacrificio y trabajo logra mantener a los niños y niñas más vulnerables en óptimas condiciones. Nosotros somos colaboradores de Sename, sin embargo, la mayoría de las cosas necesarias para mantener un hogar, las conseguimos nosotros con mucha abnegación”, señaló afectado el padre Opaso.
Y no solo el Santa Teresa fue víctima de robo, el Liceo Orli de La Cruz, colindante al hogar, desde el período de suspensión de clases por la pandemia que registra diversos ingresos de personas extrañas, a distintas horas y días de la semana a sus dependencias. Estos hechos han tenido como resultado el robo de diferentes herramientas informáticas, pedagógicas, de cocina y de los talleres de la especialidad; afectando, por ende, los recursos de la comunidad educativa.
La directora del Liceo, Gloria Peñaloza, señaló acongojada que; “a pesar de contar con alarmas y cámaras de seguridad, ha sido tan especializado el robo, que hasta han suspendido la energía eléctrica, dejando sin luz a todo el recinto y, por ende, inutilizando las medidas de seguridad”.
La Fundación Refugio de Cristo de inmediato aplicó los protocolos correspondientes; llamar a Carabineros para hacer la denuncia, tomar declaraciones y entregar detalles del ilícito, proporcionando toda la evidencia que se pudiera recolectar para el procedimiento investigativo de la Fiscalía. Sin embargo, estos lamentables sucesos no han cesado; muy por el contrario, la delincuencia sigue avanzando en el sector.
