La diabetes, esta afección crónica que afecta la manera en la que el cuerpo procesa el azúcar en la sangre, con graves consecuencias para la salud general, está más presente que nunca en esta época de pandemia. Así lo entiende el equipo de salud a del Programa Diabetes del Hospital Dr. Gustavo Fricke SSVQ, que mantiene la atención a más de mil pacientes y extiende su acción a quienes, debido al Covid, han adquirido esta enfermedad.
La Dra. Luciana Concha, diabetóloga del establecimiento, explica que manejan a 200 pacientes con diabetes tipo 1 y 900 con diabetes tipo 2. “Lo que hemos tratado de mantener es un control de nuestros pacientes crónicos vía telefónica, tanto evaluando sus exámenes como sus autocontroles. Los llamamos telefónicamente y si es necesario les hacemos ajustes en sus dosis de insulina. Si el paciente está muy descompensado lo citamos presencialmente o lo derivamos a urgencias. Además, estamos viendo a los pacientes nuevos que los trasladan desde otras zonas, especialmente los diabéticos 1, los pacientes muy descompensados que se ven presencialmente, al igual que las embarazadas. La idea es que siempre mantengamos un contacto con los pacientes, que no se sientan desvalidos y ha sido bastante agradable porque los pacientes acogen bien la llamada, se siente ayudados, apoyados y sobre todo se mantiene un lazo de control con el hospital”.
Diabetes y Covid
Lo importante, recalca la especialista, es que el paciente, que generalmente convive con la hipertensión, realice su tratamiento de forma correcta, controle su azúcar en sangre y especialmente cuide su alimentación, ya que un paciente descompensado en su enfermedad corre más riesgos de sufrir una afección severa debido al Covid.
En este aspecto, la Dra. Concha señala que aquellos pacientes que presentan diabetes debido a esta infección son igualmente acogidos en sus primeras atenciones por el Hospital: “hay pacientes que han debutado con diabetes o aquellos que se han descompensado y no han podido seguir su tratamiento en su casa, se van a las residencias sanitarias, y aquellos pacientes que se van con indicaciones de insulina o con manejo desde el punto de vista diabetológico también los estamos asumiendo acá sea por control telefónico o por contacto con los equipos que están en las residencias sanitarias para ayudarlos y darles las indicaciones. Lo que también estamos teniendo es un muy buen contacto con el programa de salud cardiovascular del Servicio de Salud; cuando sale un paciente de alta o de residencia sanitaria, nos contactamos a través de la referente del programa cardiovascular, quien los contacta con su APS directamente. Entonces el paciente una vez que es dado de alta no queda en el aire, sino que ya es absorbido por el sistema por lo menos para su primera atención”.
¿Y quienes si tienen que venir? Genoveva Carrasco, enfermera del Programa, explica que viene al hospital un promedio de 120 pacientes: “Vemos pacientes que vienen al retiro de insumos, jeringas, agujas para inyección de insulina, las cintas reactivas para hacerse las mediciones de glicemia y las lancetas. A su vez aprovechamos de ver el estado del paciente, cuando tuvo su último control, si tiene receta y ahí los tomamos para prestarles atención. Más las tomas de muestra que hacemos para los controles y vienen de forma presencial pacientes nuevos que vienen a educación de inicio de insulina y de autocontrol. También las pacientes diabéticas gestacionales que salen de alta del hospital para mantenerlas controladas durante su embarazo”.
Entre quienes vienen, la usuaria Estrella González, vecina de Forestal, destaca que “atienden excelente los doctores, las enfermeras, yo no tengo ningún problema, me han atendido bien, he recibo mis insumos y todas las cosas que necesito como paciente diabética”.
Asimismo, para no descuidar ningún aspecto de la salud de del paciente diabético, se gestiona con su CESFAM la entrega de medicamentos e incluso de insumos, así como las atenciones de salud mental, muy propia del estrés que provoca en cualquier persona, una pandemia como la actual.