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Debido a las permanentes necesidades de insumos que requiere el Hospital Carlos van Buren para el tratamiento de diversas patologías y que se han acentuados con la contingencia sanitaria, los funcionarios y funcionarias de la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Carlos van Buren prácticamente implementaron un taller de confección de diversos elementos como cojines para posicionamiento en prono vigil e insumos de protección personal, entre otros, para apoyar la recuperación de pacientes afectados con covid como con otras patologías.
Camila Candia, terapeuta ocupacional de la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación del HCVB, explicó que durante la pandemia su servicio “ha continuado con las actividades de atención a pacientes hospitalizados, principalmente neurológicos, pero además, se sumó esta tarea, misión covid-19, de confeccionar insumos, ahora nos hemos enfocado en el posicionamiento de pacientes para pasarlos a prono vigil, cuando tienen que estar sobre su vientre, boca abajo y hemos estado apoyando con el tema de los cojines que ayudan y favorecen a que el paciente pueda tolerar y mantener más tiempo esta posición en prono”, técnica que es usada en el tratamiento de pacientes con covid-19.
Necesidades Acentuadas
El contexto de la pandemia exigió al Hospital Carlos van Buren realizar una serie de estrategias para poder suministrar diversos implementos, tales como Elementos de Protección Personal e insumos de apoyo técnico para poder atender a los afectados por covid como por otras patologías.
En ese sentido, Camila Candia detalló que “al principio, cuando recién partimos, gestionamos donaciones e hicimos colectas dentro de nuestra unidad para poder cubrir las necesidades que se acentuarían con la pandemia, partimos haciendo escudos faciales y mascarillas, principalmente para nosotros mismos, luego, comenzamos con los cojines, hicimos un proyecto que se lo presentamos al hospital que pasó por el Comité Covid-19 y ahí nos han brindado los materiales como la espuma de alta densidad para que podamos moldear los cojines y venda tubular, además, gestionamos el préstamo de máquinas de coser, llegamos a tener tres pero tuvimos que devolver dos y ahora estamos con una”.
Producción
Con respecto al nivel de producción en la confección de los elementos, la profesional señaló que “por ejemplo, en cuanto a pacientes con covid-19, vemos entre 6 o 7 diarios, cada uno ocupa aproximadamente entre 3 a 6 cojines, es decir 36 unidades, es un tema porque muchas veces tienen que ser desechables y eliminados pero no tenemos muchos recursos y esto es solo para pacientes afectados con coronavirus, además, tenemos personas con otras patologías con quienes también estamos usando los cojines para posicionarlos como los pacientes neurológicos que necesitan ponerse topes antiequino en los pies o algunas cuñas anti edema en las manos”.
Pacientes infantiles
El taller de confección de la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación del HCVB también ha elaborado insumos para el tratamiento de pacientes infantiles, tanto para posicionamiento como para niñas, niños y adolescentes afectados con quemaduras.
La terapeuta ocupacional infantil del HCVB, Francisca Bravo, explicó que “con la contingencia, muchas veces los niños y niñas también necesitan el apoyo para posicionarlos en prono, por lo tanto, los cojines también nos sirven, es un aditamento muy importante para nuestros pacientes crónicos, en el hospital tenemos muchos pacientes infantiles con necesidades posturales importantes, por lo tanto, el posicionamiento con espuma de alta densidad, con órtesis y adaptaciones es fundamental para favorecer un buen alineamiento en cama, sobre todo en nuestros pacientes dismóviles, por lo tanto, esto no solamente es una necesidad que surge ahora, sino que viene de antes, nosotros previamente, solo con nuestra creatividad y autogestión, hemos podido abordarlo”.
Por último, la profesional se refirió a los insumos confeccionados para atender a pacientes infantiles con quemaduras y dijo que “en el área infantil confeccionamos muchas órtesis y adaptaciones blandas, para eso necesitamos las máquinas de coser, por ejemplo, adaptaciones para que los niños se posicionen mejor en cama y en silla de ruedas y así puedan hacer sus actividades de la vida diaria, además, como GES, también somos centro de referencia de quemados, tenemos un equipo importante del gran quemado pediátrico y dentro de la cartera de prestaciones, está la confección de los trajes compresivo para el tratamiento de las cicatrices para prevenir las secuelas en los niños y niñas, en el fondo, lo que hacemos es evaluar, tratar y confeccionar adaptaciones, ayudas técnicas y órtesis”
