El gerente regional de Esval, Alejandro Salas, hizo un positivo balance tras las intensas precipitaciones de los últimos días en la zona central, confirmando que el suministro de agua potable se mantiene normal en toda la región y que los distintos sistemas productivos de la sanitaria están operando sin inconvenientes.
“Enfrentamos un evento climático inusual para esta época del año, con fuertes lluvias que además, generaron un aumento de la turbiedad en los caudales de los ríos Aconcagua y Maipo, llegando hasta 40 veces más de lo que cualquier planta puede tratar en condiciones normales. No obstante, las obras de respaldo que hemos ejecutado en los últimos años, el uso de nuestras reservas y el aporte de fuentes subterráneas, nos han permitido mantener la continuidad y calidad del suministro en prácticamente todas las localidades que reciben nuestro servicio”, dijo Salas.
El ejecutivo señaló que sólo se registraron cortes parciales en algunos sectores de Putaendo producto del cierre temporal de la captación desde el canal La Compañía, no obstante, el suministro quedó totalmente normalizado en la madrugada de este martes.
Salas agregó que los equipos de la sanitaria se mantienen en alerta, con el fin de seguir monitoreando el estado de los caudales superficiales y la evolución de los niveles de turbiedad, aunque por el momento, la producción de agua potable continúa con normalidad. “Nuestro llamado a la comunidad es a seguir haciendo un uso racional del agua, evitando realizar un acopio innecesario del recurso, ya que eso puede afectar nuestras reservas”, indicó.
Buen uso del alcantarillado
Por otro lado, el ejecutivo explicó que se han generado algunos rebases en la red de alcantarillado, debido a la incorporación masiva de aguas lluvias y arrastre de material al sistema, eventos que Esval ha atendido con sus cuadrillas de emergencia. Ante esto, se reiteró la importancia del buen uso de la red de aguas servidas, evitando abrir tapas de cámaras y no arrojando desechos que pueden afectar el funcionamiento del sistema.
Agua caída y embalses
Tras las últimas lluvias, Valparaíso registró un total de 18,2 mm de agua caída, mientras que San Antonio (donde se produjo la mayor cantidad de precipitaciones), alcanzó los 36 mm. En tanto, en San Felipe cayeron 20 mm.
En cuanto a la acumulación de agua en los embalses, el volumen en Los Aromos alcanza los 5.580.422 m3, lo que representa un 15,8% de su capacidad (35.250.000 m3). El tranque La Luz de Curauma registra 4.264.917 m3 (un 77,5%), mientras que Peñuelas -que presenta el nivel más crítico- tiene un volumen de 850.000 m3 (0,9% de acumulación).
“Las lluvias, inusuales para la estación, mitigan en un bajo porcentaje la crítica condición hídrica que tenemos en la zona central, dado que seguimos enfrentando una mega sequía que se extiende por más de doce años consecutivos. Por ello, necesitamos seguir cuidando el agua en todo momento y tomando conciencia de la delicada situación que nos afecta”, finalizó Salas.