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Sin duda, la pandemia ha cambiado muchas de las formas de vínculo en lo referido a la atención médica. Ante este escenario y la necesidad de dar continuidad a la atención de pacientes prioritarios no Covid, el Hospital Dr. Gustavo Fricke ha fortalecido el tratamiento ambulatorio de patologías oncológicas por mieloma o linfoma, así como también la teleconsulta, para reducir la ocupación de camas y para prevenir contagios en estos pacientes que se encuentran inmunológicamente, con bajas defensas.
Quimioterapia ambulatoria
La Dra. Christine Rojas, referente de la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria e Imagenología del Hospital Dr. Gustavo Fricke, explica que este proceso que estamos realizando “es una maravilla, los pacientes son vistos, ya sea en el Policlínico o en la Unidad de Medicina Ambulatoria, se ve la condición del paciente, se hace todo el proceso que se llama etapificación, que son todos los exámenes, para saber qué terapia requiere. Con todo eso, el paciente en 48 a 72 horas, tiene toda su etapificación lista, para posteriormente ser evaluado y recibir inmediatamente, su quimioterapia en forma ambulatoria, lo cual ha permitido ahorrar una cantidad fundamental de días cama y proteger al paciente del entorno hospitalario”.
Roxana Burgos, enfermera de la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria comenta que “nuestro trabajo se ha centrado en ambulatorizar la mayor cantidad de pacientes con diagnóstico de enfermedades hemato oncológicas, lo cual, a la fecha, ha resultado bien. Tenemos pacientes que ingresan desde el domicilio a la Unidad, cosa que antes no sucedía, pues ahora ellos ya no requieren hospitalizarse y pueden recibir su primera quimioterapia como era antes, pero de manera ambulatoria”.
Teleconsulta y alivio de no estar hospitalizados
Según indica la Dra. Rojas, “la gran mayoría de los pacientes, lo que más feliz los hace, es cuando los vemos por primera vez en el policlínico y son informados que no tienen que hospitalizarse. De esta forma, el paciente vive su proceso acompañado de sus seres queridos, en un entorno protegido que es su hogar”.
Por su parte, Estela Toso, enfermera de la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria, relata que “nuestro primer paciente estaba muy contento, porque estaba acompañado de su familia, con todo su entorno. Sabemos que cuando uno va a una consulta, tiene que ir mínimo con un familiar y, muchas veces como paciente, no comprende toda la información que le entrega el médico. En este caso, el mismo médico “fue a la casa”, porque la realidad actual es que es el paciente el que va a la consulta y tiene que esperar, en cambio ahora, se le cita a una teleconsulta, para realizar su atención”.
Roxana Burgos cuenta que los pacientes se han tomado de buena manera el poder realizarse sus quimioterapias de manera ambulatoria y el seguimiento de sus tratamientos de manera telemática y por teléfono “porque el gran miedo de ellos es enfermarse mientras están hospitalizados, no quieren ir a la Urgencia, porque se pueden contagiar. Tienen mucho temor a acercarse a centros asistenciales. Entonces, al explicarles que esto va a ser en un contexto ambulatorio, que nosotros los vamos a seguir, que vamos a estar preocupados cómo están, hace que se sientan más seguros”.
Cuidado de la salud mental en pacientes oncológicos
Rafael Leiva, paciente que presenta una leucemia aguda y que viaja todos los días desde la comuna de Santa María, en San Felipe, para someterse a sus sesiones de quimioterapia ambulatoria, valora la posibilidad de acceder a este tipo de tratamientos y comenta que “estoy ambulatorio desde hace un mes, pero antes, yo estaba acá interno hasta que me dieron la posibilidad de ambulatorio. Es buena esta alternativa, a pesar de que viajo todos los días, porque no estoy en contacto con otras personas”.
Uno de los aspectos que más afecta a este tipo de pacientes y a sus familiares, dice relación con la salud mental. Por ello, la Dra. Karen Escobar, hematóloga de la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria destaca que “vamos monitorizando, si vemos a pacientes que están con algún grado de labilidad emocional, un poquito más tristes, lo vamos notando al conversar o durante la relación que se va generando con los pacientes. Para ello, tenemos el apoyo de la psicóloga-oncóloga que obviamente, tiene la disponibilidad de apoyar en el momento, y si no es así, lo hace a través de telemedicina con los pacientes y familiares más cercanos”.
En este sentido, Rafael Leiva agrega que la atención que entrega el personal es fundamental para la recuperación, de hecho “te levantan el ánimo acá, no te ponen caras feas, te dan ganas de seguir viviendo”, asegura.
