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Un violento ataque que terminó con funcionarios agredidos, el robo de computadores y serios daños, incluido el incendio de una camioneta fiscal, protagonizaron trabajadores del Terminal Pesquero Metropolitano (TPM) en Lo Espejo, en rechazo a la fiscalización que hace en el lugar el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura para evitar el comercio de pesca ilegal.
El Director Nacional de Sernapesca, José Miguel Burgos, se reunió con los funcionarios agredidos y recorrió las instalaciones atacadas, señalando que se presentará una denuncia por robo con violencia y destrucción de propiedad pública, además de seguir acciones con Carabineros y el Ministerio del Interior para reforzar la seguridad de sus funcionarios.
“Creemos que los hechos de violencia que se registraron aquí son inaceptables. Aquí además ocurrieron, de acuerdo a lo que estimamos, actos delictuales como el robo de equipamiento y agresión a nuestros funcionarios. Tal como lo hemos hecho en otros casos, vamos a seguir adelante e interponer las querellas y demandas correspondientes y vamos a perseguir hasta el final de estos procesos a quienes son responsables”, sostuvo Burgos.
Estos incidentes comenzaron cerca de las 3 de la madrugada de este jueves cuando los manifestantes bloquearon con barricadas los accesos al recinto y atacaron violentamente la oficina que Sernapesca, desde donde robaron computadores, documentación y timbres, además de destruir ventanales y parte del mobiliario fiscal, incluida una de las camionetas del Servicio que quemaron durante un enfrentamiento con Carabineros.
Los manifestantes pidieron abiertamente al Gobierno que se permita la venta de pescado ilegal. En este sentido, el Director Nacional de Sernapesca dijo que “esto legalmente no es posible, es una situación tampoco aceptable porque las medidas de administración en particular en situación crítica o de colapso como la merluza requieren de una regulación importante de la extracción, y dado eso, son las cuotas. Sin este resguardo lo esperable que esta pesquería y este pescado tan valioso para nuestra ciudadanía desaparezca del plato y va afectar la actividad de los propios pescadores artesanales en el largo plazo”.
La autoridad pesquera aclaró, además, que Sernapesca realiza fiscalizaciones a lo largo de todo Chile y que en el caso del terminal pesquero se centran aquí dado que “buena parte de los recursos que llegan a la Región Metropolitana son comercializados en este mercado y es un área de mucho interés e impacto en nuestro proceso fiscalizador”.
A través de un comunicado, la Asociación Gremial de Comerciantes del Terminal Pesquero manifestó que esta protesta no los representa y solicitó “medidas de rigor y orden al interior del terminal pesquero”, precisando que “repudiamos enérgicamente todo acto de violencia y amedrentamiento; es más, la mayor parte de los asociados se ha visto afectado por la toma de un grupo acotado de comerciantes, que ha significado perdida de capital al tener que botar la mercadería fresca por no poder ser comercializada en día punta”.
Estos incidentes se producen a un día de que la Cámara de Diputados avanzara en el proyecto de modernización de Sernapesca, que entre otras medidas, otorga nuevas facultades para perseguir la asociación ilícita en torno a la pesca ilegal, y a solo dos semanas del inicio de la veda de la merluza común, del 1 al 30 de septiembre, que es una de las principales especies que se comercializa de manera fraudulenta en el TPM, amenazando no solo su sustentabilidad sino la fuente de empleo para cientos de pescadores artesanales del país.
