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Como parte de los cuidados orientados al neurodesarrollo de los niños y niñas prematuros, Neonatología del Hospital Dr. Gustavo Fricke SSVQ trabaja en conjunto con las madres y padres la técnica de madre canguro. La Dra. Isabel Miranda, explica que “es un sistema de cuidados para el recién nacido prematuro o de bajo peso al nacer que se caracteriza por el contacto piel a piel del recién nacido con su madre o con su cuidador. Y la idea es poder transferirles gradualmente la responsabilidad del cuidado primario a los padres o a los cuidadores de un niño recién nacido”.
El método madre canguro no solamente se relaciona con trabajar el apego del niño con su madre o padre sino que también tiene múltiples otros beneficios. “Por ejemplo, ayudar al niño a manejar bien la termoregulación, la temperatura de su cuerpo, ayuda a la tolerancia enteral, a poder procesar bien los alimentos, disminuye los días de hospitalización, disminuye la necesidad de oxígeno suplementario, y así, tiene múltiples beneficios”, aclara la Dra. Miranda.
¿Como se realiza?
La matrona Camila Vicencio señala que “esta técnica se realiza en todos los recién nacidos menores de 37 semanas, o menores a 2.500 gramos hasta que lo vayan dejando con su maduración o tolerancia, eso depende, y se logra a las 40 semanas de edad gestacional corregida”. “Lo primero es que el bebé y el contacto debe ser piel a piel, por lo que debe estar solo con su pañal. La madre se prepara, se coloca la bata y deja los pechos descubiertos, para posicionarlo justo entremedio de ambos pechos. Llevamos al bebé, lo posicionamos de guatita o de cúbito ventral, con su cabecita girada hacia uno de los dos lados”, explica.
Así lo hizo Margarita González, para apoyar el desarrollo neurológico de Florencia, que nació de 29 semanas y tras salir de su estado de gravedad, comenzaron con la técnica de madre canguro. “Cuando tu bebé nace, no lo puedes tocar, no lo puedes ver, sobre todo a ella que nació sin respirar sin nada, tuvieron que hacer reanimación, estuvo intubada, no respiraba por sí sola. Ya a la semana tener este contacto con ella, es sentirlos, es estar con ellos, es sentirlos respirar, es sentirlos cerca, es sentir su olor, que ellos sientan tu olor, es como que ellos nacen de nuevo cuando tú los tienes en brazos”.
Estos cuidados son parte de los estándares de una unidad moderna de Neonatología, “y estos cuidados son importantes porque estamos hablando de un periodo crítico en la vida. No existe otro momento en la vida del ser humano donde ocurran más cambios y mayor crecimiento del cerebro que durante el segundo y tercer trimestre de la gestación de un ser humano. Por lo tanto, parte de lo que nos interesa no es solamente que el niño pase su periodo crítico y se recupere en términos de su salud y de lo que lo afecte y que haya causado la hospitalización, por ejemplo, la prematurez, sino que también es favorecer, conducir el cuidado de su cerebro para que ese niño pueda alcanzar su potencial máximo de desarrollo”, finaliza la Dra. Miranda.
¿Cómo nació el método canguro?
En 1978, el neonatólogo colombiano Edgar Rey diseñó esta técnica para reducir la mortalidad de los niños prematuros debido a la falta de incubadoras de la época, lo que permitió un alta temprana de los pacientes y la posibilidad de que los padres pudieran seguir trabajando en los cuidados de su hijo en casa.
