Con una gran participación se desarrolló la primera sesión de «El Arteterapia como regulador de las emociones», taller para cuidadores y cuidadoras de pacientes con necesidades especiales o de larga estadía hospitalaria orientado a brindar acompañamiento y herramientas de contención emocional.
Esta actividad está dirigida por la terapeuta y madre de un paciente del Programa NANEAS, Niños y Adolescentes con Necesidades Especiales de Atención de Salud, María José Figueroa, para madres, padres y cuidadores de pacientes: “Este taller nació de mi propia necesidad del cuidado personal, de esa necesidad de alguien que escuchara lo que realmente me estaba pasando y lo entendiera, no que solamente se quedara con un diagnóstico”.
“En este taller, agrega, estamos entregando herramientas de arteterapia, se van a entregar herramientas de terapia corporal, como masajes, automasajes que apunten a partes específicas del cuerpo que ayuden también a solucionar temas como el insomnio, como ansiedad, y también vamos a tener danza terapia para mover el cuerpo, soltar y autoreconocerse, autoexplorarse, volver a sentirse nuevamente femenina, volver a sentirse mujer y también va a entregarse herramienta de medicina natural de dietoterapia para resolver problemas como colon irritable y cosas así, desde algo más accesible a sus posibilidades”.
Apoyo a los cuidadores
El Dr. Claudio Cisterna, Jefe de Pediatría del Área Médico Quirúrgica Pediátrica del Hospital Fricke, señala que efectivamente los niños con necesidades especiales tienen detrás una familia que se desgasta y los sistemas de salud en general se habían centrado históricamente en el paciente, situación que ha ido cambiando en los últimos años. “Surge de forma muy bonita que una mamá de un niño NANEAS nos dice yo soy arteterapeuta y me gustaría regalar mi trabajo a otras personas. El Hospital poniendo el espacio, la Sociedad Chilena de Pediatría aportando algunos recursos, los equipos NANEAS que fueron colaborando para ubicar a las mamás. Y hemos incorporado a madres de niños NANEAS con parálisis cerebral, pero también madres de niños oncológicos o niños que tienen otro tipo de patologías crónicas. Así que estamos contentos, llegaron cerca de 10 mamás y queremos hacerlo crecer porque después es la idea que lo podamos hacer también, con los adultos, porque los adultos también tienen cuidadores”.
Recurso terapéutico
En su primera actividad, además de conocerse, las participantes exploraron sus emociones y expresaron dónde, físicamente, las sienten, pudiendo desarrollar un recurso terapéutico para explorarlas. Paulina Inostroza, mamá de un lactante con secuelas neurológicas de covid, afirma que “nos fue muy bien, una experiencia muy bonita, tenía un nudo en la garganta y aquí pude soltarlo y gracias a ellas pude desahogarme lo más que pude. Ahí estamos luchando y batallando, desde que llegó y hasta que se vaya y tenga una vida mucho más grande, siempre vamos a estar con él”.
Por su parte, María José Solorza, mamá de un niño con secuelas respiratorias por covid señala que el taller “me sirvió mucho porque es la instancia para que uno pueda expresarse, ya que a la casa uno tampoco puede llevarse la carga porque la pareja está igual, a los hijos tampoco uno se la puede llevar y en mi caso, el apoyo que tengo detrás mío también tiene una hija con problemas, entonces tampoco le puedo llevar esa carga a ella”.
Finalmente, Elizabeth Gallegos, mamá de un adolescente del Programa NANEAS da las “gracias por esta invitación y esta participación para uno como mamá es importante porque uno se siente querida, siempre con el apoyo del Hospital Gustavo Fricke, porque mi hijo ya va a cumplir 16 años y fue uno de los primeros pacientes de NANEAS, así que igual, gracias por esta motivación, por este cariño, por este anhelo de sentirnos queridas, amadas y salir adelante como siempre, por ser madre, por ser amiga de todas”.