Radio Festival La radio en colores de Chile
Sin interrupción cada mes de octubre, desde el año 2001, la danza contemporánea se hace parte del cotidiano ir y venir de la ciudad, como acción, espacio y diálogo entre sus habitantes y quienes llegan desde otras partes del país a presenciar su programación.
Compañías de todas las latitudes y propuestas, han llegado cada octubre a Valparaíso, cada una ha dejado una rémora, una pregunta, varias respuestas. 15 años sin pausa, 15 años de nuevos vínculos, nuevas ideas y más proyectos.
Este año el Festival Danzalborde tendrá una nueva impronta, sumando los frutos del trabajo realizado en el año, en transmisión de conocimientos en distintos centros educacionales de la región, es así como en las intervenciones urbanas participarán jóvenes provenientes de los talleres realizados en Quilpué, La Calera, El Quisco, Casablanca y Quintero, además de alumnos de otras comunas que se sumarán luego en las actividades de extensión.
Punto de partida: Coyhaique
Uno de los grandes aciertos del Festival se relaciona también con la integración del territorio y el ejercicio de la danza en los lugares más lejanos, este año el Festival arranca en Coyhaique con la coreógrafa y docente catalana Roser López Espinosa y su pieza “Lowland”.
Así lo explica la misma Roser López, “Lowland es un dueto, que se creó el 2013, se estrenó en Mercat de les Fleurs, que es un teatro muy prestigioso de Barcelona, y uno de los más prestigiosos de España, y que desde hace 3 años, está de gira por el mundo. Es muy bonito también ver que las personas somos muy parecidas, en todas partes del mundo y que nos mueven sensaciones y emociones muy parecidas. La pieza tiene muy buen recibimiento, y la gente se emociona. Tenemos la ilusión que el público venga a compartir ese viaje, con nosotros en el teatro, y que se emocionen y vibren con nosotros, y que les despierte las ganas de ir tras sus deseos de imaginar y llegar a puntos de ilusión y curiosidad importantes y bonitos. En Lowland verán partes hechas con mucha precisión, que sugieren el batir de las alas de las aves, es una puesta en escena muy nítida, y la danza es muy física y habla por sí misma. Y el público verá momento de mucho magnetismo, u otros animales y otros de cansancio y donde lo vencemos y seguimos volando. Estamos muy contentos y esperamos que disfruten mucho.”
Agrega que “es un espectáculo de danza que versa sobre el deseo de volar, parte de la fascinación de las migraciones de las aves y es un acercamiento físico a través del movimiento y el trabajo en equipo sobre esos viajes y odiseas que hacen las aves dos veces al año. Viendo las naves migrar, aprendí que las migraciones son viajes en la que van al límite de sus capacidades, es un reto de esfuerzo enorme y lo logran porque trabajan en equipo. Las aves funcionan con un objetivo común, en cada bandada y todas colaboran para llegar a su destino, entonces hubo un aprendizaje muy bonito, sobre el trabajo compartido, sobre el liderazgo que supone el trabajo de colaboración y buscamos cómo a través de la danza podíamos crear estrategias que se acercaran a ese trabajo de colaboración. Entonces, nos pusimos un reto, a nivel de resistencia, entre otras cosas, a nivel de ligereza en el movimiento, cómo podíamos llegar a esa idea de volar a través de nuestras capacidades, a través de los saltos, de la ligereza, de la repetición, del batir de las alas, movimientos que sugirieran el movimiento de las aves de alguna forma, con una aproximación un poquito acrobática, y cómo podíamos ponernos un reto a nivel físico, de resistencia y que juegos podíamos crear entre los dos bailarines para mantener este reto y llegar cada vez más lejos.”
“Para nosotros es una experiencia muy bonita estar en el Centro Cultural de Coyhaique, porque acabamos de llegar a un paisaje que no habíamos visto nunca en nuestra vida, cuando llegamos a la pampa alrededor del aeropuerto, y estos parajes de estas extensiones tan grandes, hicimos una excursión alrededor y vimos una cantidad de aves que no habíamos visto en nuestra vida. Es bonito descubrir cosas constantemente”, indica Roser López.
La jornada parte a las 20 horas en el Centro Cultural de Coyhaique, el miércoles 19 de octubre.
Apertura en Valparaíso
La jornada de apertura en Valparaíso, está programada para el viernes 21 de octubre; pasado el mediodía, los transeúntes podrán presenciar una intervención urbana en Plaza Aníbal Pinto, se trata de EJERCICIO 3 de Pseudónimo Compañía de Arte Contemporáneo, de la selección nacional.
También al mediodía Roser López, ya de vuelta de las australes latitudes, realizará una función de mediación, especial para escolares en el Parque Cultural de Valparaíso.
Luego a las 20 horas, también en el Parque Cultural de Valparaíso, la catalana junto al bailarín Guy Nader, nos asombrarán con LOWLAND.
El fin de semana serán jornadas de calle y sala, partiendo el sábado 22 de octubre entre las 17 y 19 horas con el uso del espacio de Avda. Argentina y Cerro Polanco con “Justo hoy día” de la coreógrafa y bailarina porteña Keny Huerta y la increíble performance “Árboles/Plantación” de la brasileña Clarice Lima con intéreptes locales.
En su reseña se refiere a Árboles como “un ejercicio sobre el deseo de permanencia, invirtiendo el espacio y el tiempo y cuestionando el tiempo. Incluso ¿cuánto el cuerpo aguanta?. El trabajo surge como deseo de enraizamiento en la ciudad, donde personas vestidas con un mismo traje, habitan en espacios de paso. Allí se contraponen al flujo del movimiento…”
La propuesta de realizar la performance “Árboles”, busca extender la discusión sobre la permanencia, al permitir que los artistas locales dejen huellas no sólo en el paisaje urbano, sino también en sus propios cuerpos. Para esto, se realizará un taller con artistas locales, con el fin de que puedan realizar la performance y discutir las prácticas y propuestas de danza en espacios no convencionales.
También estará en dicho espacio “EJERCICIO 3” de Pseudónimo Compañía de Arte Contemporáneo (Chile) y “Mide Un Segundo” (Chile) en versión ampliada con jóvenes invitados.
A las 20 horas de ese mismo día en el Parque Cultural de Valparaíso, podremos conocer “SunBengSitting” del austriaco Simon Mayer, una obra muy interesante en que el coreógrafo, bailarín y músico, despliega en escena el conflicto entre la identidad tradicional de la montaña y el ser urbano.
También a la misma hora, en el Edificio DUOC UC de Valparaíso, habrá muestras de video danza correspondientes a las obras premiadas del 8º Festival Itinerante de VideoDanza Agite y Sirva 2016 de México.
El domingo 23 de octubre entre las 17 y 19 horas, en el Parque Cultural de Valparaíso, disfrutaremos de una sesión de Mar de JAM, espacio abierto para la práctica de contacto improvisación, para conocer a las 20 horas, la propuesta de la compañía nacional Escena SaldeMente y la Banda Rim Bam Bum con “Cabeza de chancho”.
La semana siguiente, entre el 25 de octubre y el 1 de noviembre, la programación sigue incansable, la iremos detallando de a poco, con los pormenores de sus autores y propuestas.
