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Cada cuatro de julio Gendarmería celebra el Día del Suboficial Mayor y en todas las unidades penales y especiales del país se reconoce a quienes han llegado a la cúspide de su carrera funcionaria. El Centro de Detención Preventiva (CDP) de Limache no fue la excepción y así fue como el pasado viernes festejó a sus suboficiales y ascendió a parte de su personal.
La ceremonia se efectuó en el Liceo de Limache y comenzó a las 17:30 horas, contando con la presencia del director regional de Gendarmería, coronel José Luis Meza, el alcalde de la municipalidad de Limache, Daniel Morales, el jefe de la unidad local, mayor Víctor Briceño, representantes de las fuerzas armadas y de orden y familiares de los homenajeados.
La actividad comenzó con la entrega, por parte del edil limachino, de la condecoración Ilustre Municipalidad de Limache al mayor Briceño y otros cinco funcionarios. En la ocasión, además, se realizó un reconocimiento especial a los tres suboficiales mayores con que cuenta el establecimiento. Posteriormente, fue el turno del personal ascendido. En total fueron nueve los gendarmes que recibieron sus nuevos grados de mano de sus familiares y autoridades uniformadas.
Culminada la ceremonia, el coronel José Luis Meza, sostuvo que: “Gendarmería de Chile siempre destaca el trabajo de su personal, el profesionalismo. Siempre destacar a la familia porque nuestro personal trabaja 24/7 y siempre están sirviendo a nuestro país, no importando los días y horarios”.
Por su parte el jefe del CDP de Limache destacó la estrecha relación que se mantiene con el municipio local.
“Tuvimos la oportunidad de recibir la medalla municipal, lo cual, para nosotros, como institución, es un gran orgullo y, sin duda, viene a reforzar la gran amistad que tenemos con el municipio y que significa que nos apoyan en todo tipo de actividades”.
Uno de los ascendidos fue el sargento segundo, Biangelo Passalacqua. El funcionario, con 18 años de servicio, afirmó que su carrera “ha sido dura, sacrificada. Uno está en el servicio y se involucra, pero los que se sacrifican es la familia. La familia es la que queda sola porque uno está ocupado».
Junto a Biangelo Passalacqua ascendieron el ahora gendarme primero José Moraga, gendarme segundo Rodolfo Meza, cabos segundos Luis Tapia y Hans Tomasoni, sargento segundo Juan Sepúlveda y los sargentos primero Jorge Cabezas, Juan Maureira y Daniel Villalón.
