Tras dos años de receso, a raíz de la pandemia, la “Feria de Libro de Villa Alemana” regresó con total éxito: cerca de 2 mil personas asistieron a esta fiesta literaria, que este año tuvo entre sus enfoques principales el incentivo de la lectura en la niñez – en el marco del mes de la infancia – uno de los factores que incidió en la respuesta de villalemaninos y villalemaninas.
Talleres, espectáculos, presentación de libros y una sala de permanencia especialmente destinada para este público llamaron la atención de grandes y pequeños, cumpliendo así uno de los objetivos del Municipio que buscaba que “ellos y ellas, retomaran ese buen hábito de la lectura, pescar un libro, leer, interiorizarse y conocer ese mundo”, declaró la alcaldesa de Villa Alemana, Javiera Toledo.
La jefa comunal, destacó además el carácter inclusivo de la cita literaria, “que la lectura no sea un privilegio, ni tampoco para unos pocos, sino que también podamos incentivar a todos y todas”, dijo, lo que se consiguió a través de cuentacuentos sensoriales para niños y niñas en situación de discapacidad de origen visual y auditiva, y que valoró, Jaricza Alvarez, asistente a la Feria. Para la psicóloga de profesión “el encuentro con los cuentos desde otras perspectivas, desde la diversidad sensorial, como “Cuentos para los ojos”, creo que es una gran manera de abrirse a la diversidad de participantes y que se acerquen a la lectura desde otras formas”.
Talleres que también disfrutó con sus niños, Diego Lazcano, otro de los asistentes a la 9na Feria del Libro de Villa Alemana. “Estuvimos en una actividad de crea tu monstruo, donde los niños pudieron demostrar su creatividad, estuvieron recreando algo típico del teatro y ahora estamos en cuenta cuentos, así que espectacular”, señaló.
Énfasis en la promoción de escritores y editoriales locales
Otro de los énfasis que tuvo la “9na Feria del Libro de Villa Alemana” fue “promocionar y fomentar a nuestros autores, especialmente los regionales y los de nuestra comuna, y aquellos que lo hacen de manera independiente, porque sabemos lo difícil que es, en nuestro país, poder emprender como autores o autoras”, señaló la alcaldesa Toledo.
Es así como en la ocasión se presentaron libros de autores locales, entre los que destacaron “¿Dónde está el mar? Antología póstuma de Valparaíso”, de Gonzalo Ilabaca”, “El árbol de las manzanas”, de Julieta Saavedra; “Miles de voces dirán que no fue en vano”, de María Eugenia Meza; “Ecos del tiempo Subterráneo. Las peñas de Santiago durante el Régimen Militar. 1973-1983”, de Cristian González Farfán (Editorial LOM) y “Del canto… a la esperanza”, de Rebeca Arbulú y Gastón Espinoza.
“Me parece maravillosa la invitación del Municipio de abrir la visibilización, conciencia e importancia de las niñeces, por un lado y, por otro lado, a los escritores y editoriales locales. Maravilloso abrir esta puerta y que la gente responda a eso”, manifestó la seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Patricia Mix.
Conversatorios
También hubo conversatorios con autores locales, entre ellos Natalia Berbelagua, escritora y guionista chilena que logró conquistar al anti-poeta Nicanor Parra con sus cuentos cortos de narrativa erótica, y Cristóbal Gaete, escritor, periodista, editor y Premio Municipal de Literatura de Santiago (2014).
Los escritores coincidieron en abordar la necesidad de “correr los límites en la literatura”. “En el último tiempo se ha puesto el tema del canon, la identidad y los géneros en disputa, y en los géneros literarios ha pasado exactamente lo mismo. Somos escritores que hemos hecho un tipo de trabajo donde cruzamos entre géneros, hablamos sobre imaginarios que no están presentes en la escritura canónica, entonces es una oportunidad súper relevante para conversar esos temas y abrir la literatura regional”, declaró Natalia Berbelagua.
Similar opinión a la manifestada por Gaete, al referirse a la necesidad de “correr el margen”, pero “no de marginalidad, sino de (la) experimentación literaria en la forma de los libros. Tanto Natalia como yo escribimos libros que son muy poco tradicionales, muy poco correctos dentro de las convenciones de géneros literarios, así que (el énfasis) va a estar en expandir estas posibilidades”, manifestó.
El cierre de la 9° Feria del Libro de Villa Alemana estuvo a cargo de la banda musical calerana Feocci de Caraccioli.