Siguiendo el camino de la mejora de nuestros procesos educacionales, iniciado el año 2008 cuando la Escuela Naval recibió de manos de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) su primera Acreditación Institucional, hito que fue seguido por las certificaciones de la Escuela de Grumetes y de la Academia Politécnica Naval; sumando nuevas áreas acreditadas y un aumento de los años otorgados por la CNA, el año 2022 fue el turno de la Academia de Guerra Naval, plantel de posgrado de la Armada que tras un proceso de revisión de adecuación orgánica obtuvo su primera Acreditación Institucional.
La Armada de Chile, ya desde el año 2008 consideró necesario acreditar sus procesos de formación, como una forma de adecuarse a las exigencias de calidad de la educación superior nacional y consolidar el reconocimiento a la completa formación que la Institución proporciona a sus hombres y mujeres. Precisamente, con la acreditación, se logra situar a la Educación Naval en el nivel de excelencia educativa que le corresponde junto a las mejores Instituciones de Educación Superior del país.
Dentro de este contexto, este año se presentó por primera vez ante la Comisión Nacional de Acreditación la Academia de Guerra Naval, sometiéndose a la evaluación de las áreas de Gestión Institucional y Docencia. El proceso, en síntesis, consistió en una autoevaluación institucional durante el año 2021 y en una evaluación externa con académicos nacionales y extranjeros durante el año 2022, finalizando con la presentación del Director del Plantel, Capitán de Navío Sergio Gómez Weber y la resolución de la CNA, entidad que situó a nuestra Academia de Guerra Naval en nivel “Avanzado” en estas dos importantes áreas por cinco años.
La evaluación de la Academia de Guerra Naval se efectuó en base a criterios y exigencias comunes con el resto de la Instituciones de Educación Superior del país, validando ante la comunidad académica nacional la formación de posgrado que se imparte a los Oficiales de la Armada.
Desde su creación el año 1911, esta es la primera vez que la Academia de Guerra Naval se somete a un proceso de certificación de la formación que imparte mediante los programas “Magister en Ciencias Navales y Marítimas”, “Magister en Conducción y Gestión Marítima” y “Magister en Dirección Estratégica” además de los cursos de formación continua “Curso de Informaciones”, “Curso Intermedio de Planificación Operacional”, “Diplomado en Alta Dirección” y “Curso Operador MOC”, este último curso es efectuado por Personal de Gente de Mar.
Dentro de las principales acciones desarrolladas se realizó una adecuación del Reglamento Orgánico, de su Plan Estratégico y del Proyecto Educativo.
Adicionalmente, mediante la activa participación de toda la comunidad académica (directivos, docentes, alumnos, personal administrativo, egresados y empleadores) se detectaron diversas fortalezas y debilidades, siendo estas últimas incorporadas en un plan de mejoras.
Finalmente, es importante señalar que la Academia de Guerra Naval, institución centenaria, demostró que cuenta con una organización e infraestructura robusta que goza de un alto prestigio internacional y que cuenta con la capacidad para efectuar los ajustes y cambios que demanda el avanzar hacia el logro de los propósitos institucionales en los ámbitos de la docencia, investigación y vinculación con el medio.
De acuerdo al Comandante Gómez, este proceso fue «un gran desafío, fundamentalmente por la naturaleza de la función académica del plantel, ya que la Academia tiene el propósito de formar a los oficiales que tendrán la responsabilidad de dirigir el quehacer profesional, no solo de la Marina, sino que también de las Fuerzas Armadas en su ámbito conjunto; por lo mismo hemos ido adaptando nuestros programas según el avance de la sociedad, pero manteniendo siempre como centro el estudio de la guerra en el mar y sus efectos en distintas áreas”.
“Quiero agradecer el compromiso de todo el personal del plantel, que aún en los momentos más adversos de la pandemia y con las tareas complementarias que nos tocó realizar producto del Estado de Excepción Constitucional del país, pudieron realizar las numerosas tareas que implicó este proceso de evaluación y posterior Acreditación”, finalizó.