Su molestia manifestó el alcalde de Quillota, doctor Luis Mella Gajardo, ya que, luego de 24 días, la Municipalidad no ha recibido respuesta del oficio enviado al Ministerio de Obras Públicas el 3 de enero pasado, solicitando la intervención del río Aconcagua, debido a la grave crisis hídrica que enfrenta la comuna y que tiene a localidades rurales como Boco prácticamente sin agua para bebida.
El jefe comunal ha desarrollado diversas gestiones buscando soluciones al problema. Por ejemplo, el martes 7 de enero expuso la misma solicitud ante la Comisión de Recursos Hídricos del Senado, ocasión en que también estuvo presente el Ministro de Agricultura y los directores de Indap y la Dirección General de Aguas. Además, ha sostenido reuniones con el sugerente zonal de la sanitaria Esval, así como con empresarios de la zona, a quienes les solicitó la posibilidad de ceder derechos de agua para construir pozos que alimenten los sistemas de agua potable rural.
Respecto a la solicitud de intervención del río, esta se fundamenta en mediciones de caudal que realiza la propia Dirección General de Aguas, dependiente precisamente del MOP, las que dan cuenta que en Los Andes y San Felipe sí hay agua disponible, que no llega hasta Quillota, pese a que no existen embalses a lo largo del cauce.
El jefe comunal detalló que “hace más de tres semanas que enviamos un oficio, con copia al Intendente, con copia a la presidenta de la Comisión de Recursos Hídricos del Senado, donde solicitamos con muchos argumentos muy válidos la necesidad de intervenir el río Aconcagua. Hoy día el río Aconcagua se está regulando mediante un acuerdo de la Junta de Vigilancia, donde evidentemente la mayor cantidad de agua queda en la Primera y Segunda Sección. Pasa muy poca agua hacia la Tercera y Cuarta Sección, donde está Quillota. No hemos tenido respuesta, ni siquiera mandarnos a decir que no o que sí. Simplemente nos han ignorado y al que están ignorando es a la gente del valle, a la gente de La Calera, de La Cruz, de Quillota y de Limache”.
“Indolencia inaceptable”
Actualmente, el sistema de agua potable rural debe ser apoyado con camiones aljibe de la Gobernación y la Municipalidad de Quillota, que realizan alrededor de 29 viajes diarios, para llenar los estanques de la localidad. Además, existe racionamiento del suministro durante el día, buscando una mayor acumulación de agua, que es liberada para su distribución y consumo en los hogares en horario nocturno.
Al respecto, el alcalde Mella manifestó que “yo hago un llamado público al Gobierno, al Ministro de Obras Públicas, para que responda nuestra carta y para que ojalá ordene la intervención del río, como lo permite y establece la ley. La ley faculta al MOP y a la Dirección General de Aguas para intervenir el río frente a situaciones de emergencia. Y yo me pregunto qué más emergencia que el dolor que está viviendo nuestra gente de Boco que no tiene agua. Hay varias cooperativas que no tienen agua, que estamos con camiones aljibe apoyándolas. Aquí ha habido una indolencia que es inaceptable, porque todo el mundo habla que la primera prioridad es el agua de bebida y sin embargo, no se le ha garantizado el agua de bebida a las poblaciones rurales de Quillota”.
Venta y robo de agua
La molestia del jefe comunal y de los vecinos se ve aumentada al saber que existen empresarios de la zona que, teniendo derechos de agua, se dedican a vender el recurso en plena crisis, incluso publicando avisos en medios de comunicación. Y en segundo lugar, el alcalde considera que si hay agua en las dos primeras secciones del río y no llega a Quillota, es evidente que existen captaciones irregulares a lo largo del cauce que deben ser investigadas.
Según adelantó el doctor Mella, “voy a pedir a la Dirección General de Aguas que me informe sobre las fiscalizaciones del robo de agua. Está llegando muy poca agua hasta Hijuelas, pero a Quillota llega cero. Prácticamente llega solo el domingo, cuando se deja pasar una cantidad ínfima, que no dura más de 12 horas. La gente me dice que también hay robo de agua aquí en esta provincia, hay gente que está sacando agua sin tener los derechos. Entonces, el hecho de distribuir el agua mediante derechos que fueron entregados gratuitamente, ya eso es violento. Sacar agua sin tener derechos es doblemente violento. Y además, vender agua, como hay avisos hoy día de gente que aquí mismo en la provincia ofrece, cuando la Cooperativa de Boco no tiene agua de bebida, me parece que eso es imposible de aceptar”.
Volverá al Congreso
Ante la falta de respuestas por parte del Gobierno, el alcalde de Quillota volverá al Congreso Nacional la mañana de este miércoles, invitado por la diputada Carolina Marzán y acompañado por vecinos de Boco, para manifestar su molestia ante esta inacción del Ejecutivo ante la crisis hídrica que afecta a su comunidad. Adelantó que otros parlamentarios también se van a sumar durante la jornada y que él seguirá luchando por encontrar soluciones para los habitantes de Boco, aunque enfatizó que -como ha sido su costumbre- manifestándose con métodos no violentos, precisamente frente a la violencia que significa que los poderosos sigan perjudicando a los que tienen menos, tal como ocurre con la falta de agua.