Ad portas de que comience la discusión de la partida de Salud de la Ley de Presupuesto 2024, la Alianza Diálisis es Vida -que reúne a cinco organizaciones ligadas a la diálisis entre pacientes, médicos, enfermeras y prestadores- llegó hasta el Palacio de La Moneda para solicitar al Presidente Gabriel Boric que tome medidas para resolver la grave crisis de sostenibilidad que enfrenta el sector hace más de dos años.
Acompañados por el senador Francisco Chahuán y el diputado Tomás Lagomarsino, ambos integrantes de las respectivas comisiones de Salud, los integrantes de la Alianza Diálisis es Vida entregaron una carta dirigida al Mandatario, solicitando incorporar un ajuste de 15% en el arancel para hemodiálisis y peritoneodiálisis en la Ley de Presupuesto 2024, que permita subsanar la crisis y evite poner en riesgo la continuidad del tratamiento de los 25 mil pacientes. Esto, correspondería a $43 mil millones para todo 2024, solo para equiparar los costos de la prestación.
La carta fue respaldada por más de 8.500 personas entre pacientes, familiares, funcionarios de la salud, médicos, prestadores y proveedores, quienes voluntariamente y a lo largo de todo el país, firmaron la misiva dirigida al Presidente de la República, con el fin de buscar certezas y no perpetuar la crisis que ha golpeado duramente a los 230 centros de diálisis privados, que atienden al 90% de los pacientes que requieren de este tratamiento en Chile.
“Como Alianza Diálisis es Vida, hoy venimos a La Moneda con más de 8.500 firmas voluntarias, de puño y letra de pacientes, funcionarios de salud, médicos y prestadores de todo el país, para pedirle al Presidente Boric que nos escuche y nos ayude a incluir en la discusión de la Ley de Presupuesto 2024 los fondos necesarios para subsanar la grave crisis de sostenibilidad que afecta a la diálisis en el país”, señaló Paola Olguín, representante de la Alianza Diálisis es Vida.
“El sistema de diálisis está en crisis. Hace más de dos años los centros vienen funcionando a pérdida. Hoy la mayoría de los centros de diálisis que atienden al 90% de los pacientes, están sobreviviendo en base a créditos, deudas o postergando el pago de sus proveedores. Pero esto no es infinito ni sostenible en el tiempo. Como país no podemos permitir que la vida de nuestros pacientes renales dependa de las instituciones bancarias. Hasta ahora Fonasa nos ha dicho que debemos esperar hasta 2025, pero no podemos aguantar más. Lo que nosotros solicitamos es poder seguir brindando la calidad de atención que hemos entregado a nuestros pacientes renales hasta ahora y en el futuro”, agregó Olguín.
En esta línea, el senador Francisco Chahuán, señaló que “estamos apoyando a la Alianza Diálisis es Vida, no solamente porque hoy día 25 mil pacientes están con grave riesgo de que los centros en los cuales se practican las diálisis caigan en quiebra o notoria insolvencia, sino porque hace dos años se desacoplaron de los aranceles de Modalidad de Atención Institucional. Eso ha generado que aquellos que hoy día realizan el 90% de las diálisis en todo el país, que son centros privados, hoy estén en problemas serios de sostenibilidad”.
“Creemos, sin lugar a dudas, que en la discusión del Presupuesto que se está haciendo ahora en el Parlamento, se puede considerar un reajuste de al menos un 15% para asegurar la sostenibilidad de la atención de los pacientes y para que los pacientes que requieren diálisis, que se están incrementando año tras año en un 3 a 4%, tengan la atención necesaria”, agregó.
Por su parte, el diputado Tomás Lagomarsino sostuvo que “estamos acompañando a los pacientes, funcionarios de salud y nefrólogos, todos ellos parte de los centros de diálisis del país, agrupados en la Alianza Diálisis es Vida, producto de que el costo en Chile de las distintas cosas ha ido aumentando. Lo conocemos por la inflación que ha tenido números sin precedentes en los últimos dos años. Sin embargo, este crecimiento de los costos en nuestro país no se ha traducido en lo que el Estado le paga a los centros de diálisis, a través del arancel por los pacientes que se dializan en nuestro país y que alcanzan los 25 mil. Esto, ha puesto en grave riesgo la sostenibilidad y continuidad del sistema de hemodiálisis público privado en nuestro país, llevando a que centros de diálisis ya hayan tenido que cerrar sus puertas en las comunas de Chillán y Viña del Mar”.
“En ese contexto, hacemos nuestra la solicitud de la Alianza Diálisis es Vida para aumentar en 15% el arancel referencial en esta materia, producto de que es lo justo y necesario para poder sustentar adecuadamente este sistema que lleva largos años funcionando en nuestro país. La Alianza Diálisis es Vida lleva ese nombre porque la hemodiálisis les permite vivir, y sin ese presupuesto extra que piden el día de hoy se les hace imposible”, añadió.
Cabe destacar que la crisis de sostenibilidad ya ha significado pérdidas por más de $40 mil millones, en un ecosistema donde cada año ingresan más de 5 mil pacientes a este tratamiento.