La salud mental producto de la pandemia y el aislamiento ha causado graves problemas en toda la población, sobre todo en los estudiantes que han visto los últimos años relegadas sus actividades a la virtualidad. Es por ello que investigadores de la USM han desarrollado Human Place, una aplicación móvil de autoconocimiento que educa, monitorea y ayuda a reflexionar sobre hábitos que inciden en la calidad de vida de las personas.
El equipo multidisciplinario conformado por Nicolás González, encargado de la coordinación del proyecto y Nicolás Rojas Morales, investigador y parte del Departamento de Informática USM, más sicólogos y desarrolladores IA, busca generar una ayuda al alcance de la mano para los estudiantes que se encuentren en dificultades de salud mental.
Nicolás González, director del proyecto, indica que “la situación de salud mental en Chile está en crisis. Nuestras vidas están lejos de no presentar dificultades, en realidad, la de todas las personas. Entonces, entendiendo que esta calidad de vida es este conjunto de variables de distintas dimensiones (mental, físico, social y del entorno) podemos extraer conocimiento y revelaciones a través de algoritmos de inteligencia artificial”.
Respecto al uso de la aplicación, disponible en Google Play y AppStore, los investigadores explicaron que al inicio del programa se entrega a los estudiantes micro conversaciones -denominadas “semillas”- que consisten en un desafío de 28 días y son diseñadas por sicólogos para implementar los hábitos de Planificación, Meditación, Gratitud y Aceptación. La analogía apunta a que “cada semilla debe cuidarse y ser regada diariamente (siguiendo la conversación con Human Place) hasta transformarse en planta.”
“Nuestro algoritmo, incentiva a las personas a “plantar otras semillas”, que se adecuan a sus necesidades como higiene del sueño, nutrición saludable, pausas activas, entre muchas más”, apunta Nicolás Rojas Morales.
Aplicación móvil
La recomendación de uso de la aplicación es dos veces al día para fortalecer los hábitos matutinos y nocturnos. En la mañana se practica la meditación y planificación para calmar la mente y definir cómo será el día. Durante la noche, fortalece los hábitos de gratitud y aceptación con el fin de tranquilizar la mente antes de un sueño reparador. Una vez que el estudiante interactúa con Human Place, se sugieren estrategias personalizadas para disminuir el estado de estrés.
Rojas agrega que los últimos años de la pandemia han aplicado una gran presión hacia los estudiantes lo que “puede llevar a que sufran del síndrome un burnout estudiantil, donde la capacidad y motivación relacionada al estudio se ve altamente afectada, al igual que su rendimiento físico y mental. Por ende, creemos que es importante levantar un proyecto que pueda ayudar, de alguna manera, a cuidar la salud mental de los estudiantes”.
Para finalizar señala que “el objetivo de desarrollar Human Place no es suplir la importante labor que realizan las y los trabajadores de la salud (sicólogos/siquiatras). Al contrario, creemos que la Inteligencia Artificial está al servicio de las personas y trabajadores de la salud, como un asistente cognitivo que es capaz de sugerir alternativas y que sean las personas quienes decidan qué hacer”.