Producto del desarrollo inmobiliario, industrial y agrícola de la ciudad de Quillota, lo que ha provocado una reducción de los espacios naturales en la comuna, los pueblos originarios han manifestado que se encuentran afrontando un debilitamiento en su interacción, como sus saberes tradicionales asociados al contacto con la naturaleza.
Es por eso que el proyecto consistió en la construcción de un invernadero para cultivo de especies medicinales, alimentos y saberes tradicionales. Además el espacio servirá para compartir los conocimientos de las distintas culturas agrupadas en la asociación.
“Quiero agradecer y felicitar este trabajo en conjunto de la Asociación de Pueblos Originarios de Quillota junto con la municipalidad y Fundación Minga. Este tipo de iniciativas permiten fortalecer el trabajo colaborativo, la protección y la conciencia en las temáticas ambientales”, señaló el Seremi Hernán Ramírez.
La Asociación de Pueblos Originarios de Quillota está compuesta por más de 100 socios integrantes de los pueblos: Mapuche, Diaguita, Aimara, Atacameño y Kolla. Se ha dado naturalmente una confluencia de saberes Indígenas que han ido rescatando y potenciando a través de los años de trabajo de la organización.
Paula Vázquez, alcaldesa (s) de Quillota, quien también participó de la instancia indicó que “para nosotros este proyecto cobra mucho sentido que pueda desarrollarse en este espacio ya que congrega a la comunidad educativa, a los estudiantes y profesores que se han hecho parte del proyecto y de esta forma complementar los procesos de formación. Sin duda que abre un espacio para que los pueblos originarios nos puedan compartir toda la riqueza cultural y el aporte que ellos pueden significar a través de los cultivos.”
Dentro de las principales actividades realizadas por el proyecto se contempló laa instalación de una vermicompostera y zona de compostaje, la construcción del invernadero, capacitación en técnicas de cultivo en Invernadero, y capacitación en manejo de residuos orgánicos.