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Labores de inteligencia y el trabajo conjunto con la Policía de Investigaciones dejaron al descubierto las intenciones de un grupo de privados de libertad del Centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes. Los reclusos esperaban evadir la seguridad del recinto y escaparse utilizando una soga de más de 15 metros, construida con ropa y retazos de tela.
Las intenciones de los internos se vieron esfumadas la noche de este jueves cuando el director regional de Gendarmería, coronel José Luis Meza Guajardo, encabezó un procedimiento de registro y allanamiento con el objetivo de lograr encontrar la soga.
El operativo, concentrado en los dormitorios cinco y seis, dio el resultado esperado, pues personal uniformado hayo el objeto en el dormitorio cinco, el cual alberga a población penal condenada. De igual forma, se incautaron teléfonos celulares y armas blancas y licor de fabricación artesanal.
El coronel Meza sostuvo que: “La dirección regional recabó información, en conjunto con la PDI de Valparaíso, donde se pudo manejar información de que había una planificación de una fuga desde el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes”.
“Se logró encontrar una soga artesanal de, aproximadamente, 15 metros de largo. Como a las 19:40 horas se encontró ese elemento prohibido. Felicito al personal por su profesionalismo y buen desempeño y así evitar una fuga desde ese penal, ya que estaba planificada para que se realizara la noche de ayer”.
Consultado respecto a los privados de libertad que elaboraron este plan, el coronel Meza afirmó que “se logró individualizar a las personas que estaban involucradas en esta planificación. Los internos fueron trasladados, removidos de esa unidad, y hoy se encuentran en el Complejo Penitenciario de Valparaíso, en un módulo de seguridad”.
En el allanamiento participó personal de la misma unidad andina y funcionarios de unidad de servicios especiales penitenciarios de Quillota, además del jefe operativo regional, mayor Fabián Carrasco Prieto.
