Durante ocho días, un equipo de científicos del Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de la Universidad Austral de Chile (UACh) y el Alfred Wegener Institute (AWI) realizó una campaña oceanográfica al fiordo Yendegaia, ubicado en el canal Beagle, al sur de la Región de Magallanes y Antártica Chilena.
A bordo de la embarcación Huracán, el grupo multidisciplinario de ocho expedicionarios zarpó desde bahía Mansa, a 50 kilómetros al sur de Punta Arenas. La campaña oceanográfica tuvo cuatro objetivos: recuperar un anclaje con información biológica y física; reinstalar el sistema de monitoreo con sensores oceanográficos y una trampa de sedimentos que captura diversos tipos de muestras; llevar a cabo una transecta oceanográfica a lo largo del fiordo; y descargar datos de una estación meteorológica instalada en isla Hoste.
En la travesía, además, se llevaron a cabo otras actividades científicas como la extracción de ADN ambiental y prospecciones visuales para mamíferos marinos. Se avistaron cuatro especies de cetáceos: delfín austral, delfín chileno, ballena jorobada y ballena sei.
“El área geográfica donde realizamos los trabajos científicos es clave, debido a que confluyen dos sistemas de agua: estuario (de deshielo del glaciar) y marina (canal Beagle)”, aseguró la bióloga marina y magister en recursos hídricos del Centro IDEAL, Carla Mellado. “La transecta oceanográfica implica muchas maniobras de forma simultánea, desde la boca del fiordo. En este caso, el trabajo colaborativo in situ fue fundamental para lograr todos los objetivos”, agregó.
“Los estudios de prospección son especialmente relevantes en sistemas que han sido poco estudiados, como el canal Beagle. Es importante valorar el rol ecológico que tienen las altas latitudes y, desde esa perspectiva, esta expedición fue una gran oportunidad para llevar a cabo diversos trabajos científicos”, afirmó el investigador del AWI y del Centro IDEAL, Dr. Diego Filún.
Un canal pocas veces estudiado
El Canal Beagle mide aproximadamente 280 kilómetros de largo y se formó a causa del avance y posterior retroceso de glaciares. Paralelamente, posee una ubicación estratégica, pues comunica los océanos Atlántico y Pacífico.
Pese a que posee una rica biodiversidad marina, no existe una gran cantidad de información oceanográfica de él.
La expedición fue encabezada por el biólogo marino, Dr. Luis Bedriñana, investigador de los centros Copas Coastal, Ballena Azul e IDEAL. “Se lograron todos los objetivos en el tiempo planificado, a pesar de que tuvimos condiciones meteorologías adversas durante prácticamente los ocho días. Hubo una buena coordinación entre el equipo técnico, científico y la tripulación”, concluyó el Dr. Bedriñana.
El anclaje instalado en el canal Beagle es parte del observatorio marino y terrestre que se desarrolla en marco del Proyecto DYNAMO en cooperación con Argentina, Alemania y Chile.