Una de las preguntas que a diario deben hacerse muchos padres con hijos en etapa escolar es qué mandarles de colación. Y es que conciliar la pauta de alimentos saludables que envían los colegios con los gustos de cada niño no es fácil, pero si se pone en práctica algunos consejos y creatividad a la hora de preparar estas meriendas, pueden obtenerse buenos resultados.
Gabriela Lizana, Directora de Carrera de Nutrición y Dietética de UDLA Sede Viña del Mar, comenta que “el objetivo de las colaciones es contribuir a la saciedad entre una comida principal y otra, entregando un aporte calórico bajo y alto en nutrientes saludables. Si una persona o un escolar, pasa más de cuatro horas sin ingerir un alimento, se debe incorporar una colación saludable, de lo contrario, no es necesario”.
La nutricionista explica que para fomentar el hábito de consumir colaciones saludables, primero es importante saber qué comestibles cumplen que esa característica: son aquellos alimentos que poseen un bajo aporte calórico, tienen una buena fuente de vitaminas y minerales, nutrientes fundamentales para el crecimiento y desarrollo del escolar, como también para fortalecer su sistema inmune.
Aquellos productos que cumplen todos estos criterios son los alimentos altos en proteína como lácteos bajos en grasa (leche, yogurt, quesillo, queso fresco), el huevo, las legumbres, aportando además a la saciedad y siendo fundamentales para el desarrollo muscular.
Otro nutriente que cumple con las características son los carbohidratos complejos, más conocidos como fibra, encontrándose en frutas y verduras, las que idealmente deben comerse crudas y con cáscara, siempre acompañadas de agua. También en alimentos integrales como cereales, galletas o pan.
Sobre los frutos secos, si bien son saludables y aportan gran cantidad de lípidos beneficiosos para el organismo, la académica advierte que tienen menos poder saciante y se tiende a comer más, aumentando considerablemente el aporte calórico, por lo que se debe consumir solo la porción recomendada para cada uno de ellos.
Recomendaciones:
- Privilegiar los alimentos saludables que a los niños les gusten e ir incorporando gradualmente aquellos que no sean tanto de su agrado, con pequeñas porciones o mezclándolos con aquellos que ya comen.
- Preparar colaciones saludables en familia: barras de cereal, galletas de avena, sándwiches, ensaladas de fruta, palitos de verduras, para que sea una actividad entretenida para los niños y los motive a comer lo que ellos mismos prepararon.
- Buscar recetas de colaciones lúdicas, por ejemplo, un huevo duro con ojos y boca de verduras o aceitunas, un sándwich con forma de un animalito, para que su presentación sea atractiva para los niños.
- Adicionalmente, enviar una botella de agua pura o saborizada con frutas para promover la hidratación y ayudar a una mayor saciedad.
Pauta de colaciones saludables para una semana de clases:
- Lunes: manzana con cáscara.
- Martes: yogurt descremado.
- Miércoles: sándwich de quesillo, tomate y lechuga.
- Jueves: naranja.
- Viernes: bolitas de garbanzo o lentejas.