Cuatro estudiantes con necesidades educativas especiales representarán a Valparaíso en torneo a jugarse la próxima semana en Chillán

El 24 de octubre saltarán a la cancha en el campeonato nacional en Chillán. Quien gane ese encuentro clasifica a los juegos mundiales a realizarse nada menos que en Berlín, en 2023. Pero ellas están ajenas a el stress competitivo. Lo suyo es divertirse, pasar un buen rato con sus amigas y concretar su sueño más importante: demostrar que, si se lo proponen, son capaces de hacer cualquier cosa.

Ese es el espíritu que reina en la mente de cuatro alumnas del Centro Educativo Gran Bretaña y que el próximo lunes representarán a SLEP Valparaíso y a la comuna en general, en el torneo de básquetbol especial 3×3 que reunirá a los mejores equipos del país en la categoría.

Lideradas por su profesor de educación física, Víctor Parra, llegaron a esta instancia tras clasificar a nivel comunal, derrotando a otros establecimientos de su tipo como “Nueva Siembra”, “Los Fresnos”, entre otros. Pero su logro va más allá de lo deportivo, se trata de una autosuperación, es en definitiva una lección de vida.

Ellas tienen entre 15 y 16 años -cursando entre 7mo básico y el nivel laboral 1C y aseguran que las hace feliz poder jugar juntas, además que cuentan con el respaldo y orgullo de sus familias y comunidad educativa.

El profesor Parra, quien tuvo que prepararse con cuatro cursos para poder hacerse cargo del viaje de las niñas, explica que lo que más le interesa es “que ellas tengan la vivencia, el hecho de participar en un torneo así, no sé si podemos ganar, pero rescato la experiencia que van a tener: el viajar, el participar”.

“El deporte relaja, ayuda en la condición física y ellas se divierten, el hecho que ellas se rían y disfruten es fundamental. A nuestros niños y niñas muchas veces los dejan de lado y les dicen que no pueden, pero yo espero con ellas, más que aprender un deporte, que sean libres, disfruten, que tengan la experiencia de jugar un campeonato, porque uno no sabe las realidades de sus casas. Entonces en esta instancia, si ellas pueden ser felices, a ellas les sirve mucho también en lo pedagógico. El deporte les ayuda”.

Felicidad

Las adolescentes tienen una condición especial, presentan discapacidad intelectual, lo que no les impide desarrollarse y enfrentar esta oportunidad con alegría.

Esperanza Castillo aseguró que le gusta mucho jugar con sus compañeras y anhela “salir por otras ciudades o países, jugando”, a lo que Gisell Beltrán complementa con que “no sabía que nos iba a ir tan bien, me sorprendí”.

“Jugar es relajante y me da fuerza, estoy emocionada de ir”, contó por su parte Paloma Frez; en tanto Belén Collao aseguró que “lanzar la pelota es lo que más me gusta, y me va a gustar jugar en otro lugar”

Pero hay algo más profundo desde lo pedagógico, tal como lo interpreta Pamela Rojas, subdirectora del establecimiento.

“Para ellas es fundamental. A nivel integral a ellas les ayuda mucho en su autoestima, en la valoración de sentirse importantes, pero también a nivel pedagógico porque ellas se están dando cuenta de que sí pueden hacer algo más que hacer una tarea o trasladarse solas desde su casa, es darse cuenta de que pueden y tienen las mismas oportunidades si ellas luchan por sus anhelos”.

“Sí les pedimos que tienen que ser responsables, no despreocuparse de sus estudios, que tienen que venir a sus entrenamientos y que todo lo que quieran hacer en su vida lo lograrán si son responsables”.

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