Experta sostuvo que el Estado debe incentivar la inversión en Valparaíso

En el mes de julio, hace 20 años, la UNESCO declaró a la ciudad de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad. El organismo especializado deberá tomar decisiones respecto al estado de conservación en base a los antecedentes recopilados en la visita de expertos a la Ciudad Puerto en noviembre de 2022. 

En ese entonces la comisión elaboró recomendaciones para la gestión del casco histórico, cuya declaración se someterá a análisis durante el Comité del Patrimonio Mundial, a realizarse en el mes de septiembre en Arabia Saudita.

La docente de la Escuela de Ingeniería de Construcción y Transporte de la PUCV, Paulina Kaplan, indicó la relevancia del trabajo de la Corporación Municipal de Administración del Sitio Patrimonio Mundial, organismo cuya misión es promover el desarrollo de proyectos y acciones que aseguren la preservación del título.

“La corporación debe hacerse cargo de las recomendaciones realizadas que se evaluarán en septiembre, entendiendo que esta labor nos compete a toda la comunidad, y especialmente a los habitantes de Valparaíso, así como al Estado de Chile”, indicó la académica.

Inversión

En este sentido, la experta comentó que la inversión de privados fue clave en los primeros años de la declaratoria. “A 20 años de la nominación, debemos hacer una reflexión con respecto a lo que ha sucedido durante este tiempo. Cuando se inició el proceso de declaratoria, el Estado creó subsidios de rehabilitación patrimonial para el mejoramiento de viviendas, como también la transformación de ellas en hoteles y restaurantes, entre otros. Estas acciones fueron relevantes para la puesta en valor del patrimonio”.

Agregó que el llamado a tomar acciones es transversal a todos los actores, en materia de seguridad e inversión, los cuales debieran ser incentivados por el Estado, opinó la arquitecta. El objetivo recalcó es que “inversionistas vuelvan a confiar en Valparaíso y justamente es el Estado el que tiene que hacer el esfuerzo para que realmente se den las condiciones”.

“Una ciudad que no se vive va perdiendo también su patrimonio inmaterial que es sumamente importante: sus habitantes. Hacemos un llamado para volver a creer en Valparaíso, y seguir sustentando este título”, finalizó la académica