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Con la intención de ir en ayuda de los perros que son abandonados por sus dueños, los funcionarios del Centro de Detención Preventiva (CDP) de Limache decidieron apadrinar al refugio Esperanza Canina, recinto ubicado en la misma comuna y que actualmente acoge 52 canes.
Entre las principales necesidades de las mascotas está la alimentación y ropa de abrigo, por lo que el personal de la unidad penal ya inició una campaña para ir en ayuda del Refugio creado por Tamara Jorquera y que ya tiene cerca de siete años de vida.
El jefe de la unidad penal limachina, mayor Víctor Briceño, destacó la importancia que esta acción tiene.
“La encargada del Refugio nos invita a conocer su obra. Acudimos al sector y vemos el cariño con el que él y su pareja se dedican a darle atención y cuidado a los perros que recogen dese la calle. Eso se le transmite al personal y, de inmediato, el personal se pone en campaña y se interesa en apadrinar este refugio canino y apoyarlo con las cosas que ellos requieren”.
Tamara Jorquera enfatizó la necesidad de contar con ayuda para los 52 canes que cuida.
“La alianza más importante para nosotros es la ayuda que pueda prestar Gendarmería en donaciones y cooperaciones para ellos. Ojalá puedan consistir en frazadas, en mantas y todo lo que ellos necesitan. Sería genial que Gendarmería pudiese ayudar y cooperar en esas cosas. Siempre estamos pidiendo gente que pueda venir a ayudarnos”.
Tamara también hizo un llamado a apadrinar a algún perrito, ayudando así a costear las necesidades del animal, pero, agregó la joven, esto no los convierte en dueños del mismo.
Respecto a la iniciativa para reunir comida y ropa de cama o prendas de vestir, el cabo Rigoberto Castro afirmó que entre el personal del establecimiento penitenciario existe alegría por poder colaborar con quienes tanto lo necesitan.
“La campaña de recolección de alimentos y abrigos partió la semana pasada, el día lunes. Estamos sumamente contentos en el apoyo de este Refugio Esperanza. Vamos a tratar de hacerlo cada mes. La intención es poder concientizar, de poder ayudar, de poder darle una mejor vida a estos hermanos menores. Hay tantos perrito vago, tanto perrito en calidad de abandono, que de verdad que da bastante pena”.
El cabo es adiestrador de perros, por lo que ya se ofreció para ayudar directamente a quienes se encuentran en el refugio.
