Un exhaustivo procedimiento llevado a cabo por medio centenar de funcionarios de Gendarmería permitió que un plan de fuga urdido en el módulo 105 del Complejo Penitenciario de Valparaíso no lograra ejecutarse.
Todo comenzó cerca de las 17:42 horas de este jueves con el choque de un poste del alumbrado público, ubicado en el exterior del Complejo Penitenciario (CP) de Valparaíso y el cual dejó a la unidad penitenciaria sin suministro eléctrico, debiendo activarse los generadores de emergencia con que ésta cuenta. Dada la situación, y tomando en cuenta que el camión que provocó el incidente se dio a la fuga, el director regional de Gendarmería, coronel Tito Barriga, ordenó que se elevaran las medidas de seguridad al interior del recinto penitenciario.
El jefe del Complejo porteño, teniente coronel Antonio Ibarra, fue el encargado de ejecutar los lineamientos entregados por el director regional.
“Un camión botó un poste de luz, lo que provocó que colapsaran los automáticos y esa situación, en definitiva, nos generó activar los protocolos de seguridad, reforzando las líneas de fuego”, expresó el teniente coronel.
A las 20:45 horas se recibiría una llamada telefónica anónima denunciando un plan cuyo objetivo era una fuga desde el módulo 105 del Complejo. Ante este nuevo antecedente el coronel Barriga procedió de forma inmediata a activar el plan de enlace y convocar a las unidades especiales, iniciándose el recuento de la población penal. Además, ordenó que se tomara contacto con Carabineros y la Policía de Investigaciones, quienes procedieron a realizar rondas en el exterior de la unidad.
Pasadas las 21.00 horas se dio inicio al procedimiento de registro y allanamiento del módulo 105, el cual se extendió hasta cerca de las 01:30 de la madrugada. Esta labor implicó el traslado de la totalidad de la población que éste alberga hasta el gimnasio ubicado en el mismo recinto penal.
Fue durante este procedimiento que los funcionarios de la unidad operativa regional -suboficial Wladimir Sanhueza y cabo Patrick Cornejo- se percataron que parte de la reja del patio del pabellón se encontraba cortada en sus vértices. Posteriormente es el mismo suboficial quien encuentra en el sector de los baños del patio una bolsa en cuyo interior se escondía un jockey institucional y un chaleco de color azul marino.
“Los elementos prohibidos fueron incautados en las dependencias de los internos. Específicamente la vestimenta fue incautada dentro de un shaft, en el sector de baños que se encuentra en el patio del módulo. El sargento Sanhueza, que me acompañó en ese momento, se introdujo en el shaft y se percató que había una bolsa de nylon, en la cual se encontraba la vestimenta”, sostuvo el cabo segundo Patrick Cornejo.
Este hallazgo se sumó a dos “diablos”, teléfonos celulares, cargadores y armas blancas de fabricación artesanal ubicados en distintos puntos del 105.
Por su parte el jefe del Complejo Penitenciario de Valparaíso destacó que: “Este procedimiento terminó alrededor de las 01:30 de la mañana y en ese sentido quiero destacar el profesionalismo y la competencia de nuestro personal, lo que nos permite adelantarnos a cualquier eventualidad”.
Con la finalidad de poder esclarecer los hechos e identificar al o los reclusos involucrados Gendarmería inició el inicio de una investigación interna. De igual forma, se entregaron los antecedentes a la fiscalía regional de Valparaíso.