Diez años atrás, una grave enfermedad estuvo a punto de cambiar el destino de Jessica Cortés. El diagnóstico de un cáncer cervicouterino precoz, detectado a los 24 años, requería ser tratado mediante quimioterapia y una histerectomía, intervención donde se extirpa de forma completa el útero. No obstante, el equipo médico de la Unidad de Ginecología Oncológica del Hospital Dr. Gustavo Fricke del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota, efectuó una innovadora técnica, que hasta entonces no se había realizado en Chile, de modo de preservar su fertilidad para el momento en que ella quisiera ser madre. Luego de su caso, esta misma técnica ha beneficiado a 13 mujeres, permitiendo preservar la fertilidad de pacientes con la misma patología.
“La vida me cambió en un 100%, he tomado esto como una experiencia de vida, es maravilloso, porque cuando a uno le dicen que tiene cáncer, piensas altiro que te vas a morir y que no vas a poder tener hijos”, explica Jessica, mientras la acompañan Josefa (5 años) y Felipe (3 años) quienes dan cuenta del éxito de la alternativa propuesta por los especialistas. Ellos nacieron tiempo después de la intervención quirúrgica denominada traquelectomía radical vaginal.
¿Qué es la traquelectomía radical vaginal?
El jefe de Ginecología y Obstetricia del establecimiento, Dr. Erasmo Bravo, explica que el único “tratamiento que en ese minuto estaba establecido, era una histerectomía radical con radioquimioterapia. Pero por su juventud, decidimos hacer un tratamiento innovador, una traquelectomía radical vaginal. Había solo un caso publicado en Holanda. Eso significa que hacíamos la extirpación de todos los ganglios pelvianos a través de laparoscopía, retirábamos sólo el cuello del útero, con los tejidos que lo rodeaban, conservando el cuerpo uterino, de esa forma ella quedaba con la posibilidad de embarazarse”.
Para la joven madre, “fue todo muy rápido, yo venía saliendo de la Universidad, no tenía pensado ser mamá, pero era la oportunidad que yo tenía para poder tener hijos. En mi caso, valió la pena, todo el sacrificio. Estoy muy agradecida, y yo les digo a las mamás, mujeres que quieren ser mamás, que luchen, que dejen los miedos de lado, se atrevan, que sí se puede. La relación con el equipo médico fue muy buena, muy confiable, son excelentes médicos, profesionales que le dan la confianza a uno de que sí se puede”.
13 casos con innovadora técnica
La experiencia de Jessica, es uno de los casos emblemáticos de la Unidad de Ginecología Oncológica del Hospital Dr. Gustavo Fricke, donde hay un equipo médico formado por 10 especialistas gineco-oncológicos que atienden a todas las pacientes de la red del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota. De acuerdo con el Dr. Erasmo Bravo, es el equipo “más complejo de Chile, por la cantidad de población que tenemos asignada, por la cantidad de atenciones tanto ambulatorias como quirúrgicas que realizamos, así como la complejidad de las prestaciones que otorgamos”. A la fecha, esta misma técnica ha beneficiado a 13 mujeres, permitiendo preservar la fertilidad de pacientes con la misma patología.
El Hospital Fricke atiende pacientes con patologías GES como cáncer ovárico y cervicouterino, y también cáncer de endometrio, entre otros. Dentro de todos ellos, “el cáncer más importante en relación al embarazo es el cérvico uterino. La idea es preservar el embarazo y la fertilidad en pacientes muy jóvenes”, indica el Dr. Bravo.