Llaman a respetar la veda del erizo

El erizo forma parte de la identidad gastronómica de alta gama en Chile, siendo parte de la carta de prestigiosos restoranes y numerosas “picadas” en las caletas del litoral central. Las aguas de la Región de Valparaíso permitieron que este recurso fuera abundante y de alta calidad en la década de los 80´, llegando a ser exportado a exigentes mercados, como Tokio.

Hoy no abunda el erizo en nuestras costas, sin embargo, los propios pescadores artesanales señalan que su talla mínima de pesca y su régimen de veda han permitido una estabilización de su abundancia, favoreciendo el abastecimiento de los restoranes de la zona central, donde cada unidad puede venderse hasta en 800 pesos.

De ahí la importancia del próximo período de veda, que va desde el 15 de octubre hasta el 15 de enero de 2017, por lo cual, diversas instancias hacen un llamado a respetar la misma. René Barrios, presidente de los pescadores de Caleta Quintay, organización que puntea los mayores desembarques históricos de erizo en la región dice que “esperamos que durante este período de reproducción del erizo, se respete la veda e invitamos a los consumidores a hacer una pausa en su consumo, que prefieran otros productos pesqueros disponibles y que nos ayuden a fiscalizar de que no se venda el recurso de forma ilegal”. Por su parte, el chef del Restaurant Pescadores de Caleta Quintay, David Garrido, explica que “la calidad del erizo de la zona es notablemente superior, por lo cual es relevante que se respeten estos procesos. El tamaño de lenguas, su color amarillo anaranjado intenso y su textura y sabor suave, es muy característico y único en comparación a los erizos de la zona norte y sur. Bastan solo dos o tres erizos para que los comensales queden muy satisfechos. De ahí la importancia de cuidar el recurso”.

Trabajo de Recuperación.-

“El erizo de la zona central posee gran potencial, 11 de las 34 caletas los explotan formalmente y es parte de los recursos bentónicos de alto valor que habitan en las áreas de manejo y por tanto, un buen manejo de su pesquería y comercialización contribuiría significativamente a la sustentabilidad de las caletas pesqueras”, señala Diego Ramírez, director del Campus Quintay de la Universidad Andrés Bello (UNAB). “Desde hace dos décadas hemos investigado para perfeccionar la tecnología de cultivo y hoy junto a los pescadores de la caleta hemos repoblado zonas muy dañadas observando su recuperación, logrando incluso entusiasmar a otras organizaciones de pescadores que ven en estas estrategias de acuicultura extensiva una real alternativa para su futuro”, agrega Ramírez, finalizando con un llamado a “respetar esta importante veda, ya que sólo así podremos continuar este proceso recuperativo”.

Cabe destacar que la UNAB, aprovechando esta época de reproducción del erizo, posee un programa de educación ambiental orientado a los colegios para dar a conocer su particular ciclo vida a los estudiantes, a través de experiencias prácticas en sus laboratorios de biología marina en el Campus Quintay, donde los erizos son reproducidos en vivo y en directo. “Esta experiencia permite que los estudiantes puedan acercarse al mundo marino y entender conceptos que van desde el desarrollo embrionario, hasta la importancia del plancton marino para el planeta”, señala Francisca López, coordinadora del programa de esta casa de estudios superiores. “En estas actividades con colegios, los pescadores se involucran entregando también su visión respecto a la importancia socio-económica del recursos erizo y de paso explican como ellos se organizan para hacer de la pesca una actividad sustentable”, agrega López.

 

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