El 27 de diciembre del año 2013 entró en vigencia la Ley N°20.603 de Penas Sustitutivas a la Reclusión y que incluye la Prestación de Servicios en Beneficio a la Comunidad (PSBC). Hasta el 30 de octubre pasado habían sido 1307 las personas de la región de Valparaíso que habían cumplido con esta medida que permite que el penado reestablezca el daño causado a la comunidad por medio del trabajo.
La cifra fue entregada por el director regional de Gendarmería, coronel Eduardo Muñoz Bravo, durante un desayuno realizado en el hotel O’Higgins con las entidades que han suscrito un convenio de PSBC con la institución verde boldo. LA actividad tuvo como objetivo compartir experiencias y analizar el funcionamiento de la prestación.
“Recogiendo la experiencia institucional se logra aumentar las medidas alternativas, hoy en día conocidas como medidas sustitutivas, a la privación de la libertad, para así evitar el contagio criminógeno, porque hay personas que los propios tribunales consideran que no son un peligro para la sociedad. Evitamos el contagio criminógeno y, al mismo tiempo, le permitimos a esa persona que a través del trabajo a la comunidad reparen el mal causado. En ese contexto esta región tiene más de 1300 personas que han cumplido condena en este sistema”, expresó el coronel muñoz.
A los 1307 usuarios se suman 219 que se encuentran cumpliendo la pena en alguna de las 107 las instituciones beneficiarias y entre las cuales se encuentran: municipios, juntas de vecinos, uniones comunales, bomberos, Hogar de Cristo, etc.
Experiencia Exitosa
Una de las últimas entidades que suscribieron el contrato de colaboración fue el Instituto Nacional de Deporte (IND) de Valparaíso. Más de una decena de penados han cumplido las horas de trabajo encomendadas en el parque Alejo Barrios, el Polideportivo o el estadio Elías Figueroa. Ha sido tan bueno su desarrollo que en el mes de septiembre el IND decidió contratar a una de esas personas.
“Ha sido una grata experiencia tener este convenio con Gendarmería. Hemos tenido algunos problemas con algunos penados, pero son los menos, serán el dos o tres por ciento. Con la mayoría hemos trabajo muy bien. Han hecho trabajos específicos, que a nosotros nos cuesta hacer por recurso, por no tener la cantidad de personas. La idea ha sido tan positiva que hace un par de meses atrás logramos contratar a una de estas personas como funcionario a honorario del IND”, sostuvo Jaime Viveros, funcionario del IND.
Una experiencia tan buena como la experimentada en el IND es la que vivió Martín López quien llegó hasta el Ejército de Salvación para cumplir con 400 horas.
“Gracias al servicio comunitario puedo hacer mi condena en la calle. Me ha servido muchísimo por el altruismo, para darme cuenta que hay gente que realmente necesita ayuda. Ha sido una muy buena experiencia, me ha engrandecido el alma, el corazón”.
En la actualidad Martín lleva cumplidas más de 300 horas y gracias al trabajo de los profesionales del Centro de Reinserción Social también se encuentra realizando un curso de cocina internacional.