Con una ceremonia en el Molo de Abrigo de la Armada en Valparaíso, el Gobierno de Chile -a través de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca)- dio el vamos oficial al inicio de las labores del nuevo y flamante buque de investigación pesquera y oceanográfica Dra. Barbieri. La embarcación, que sumó una inversión fiscal de poco más de US$14,5 millones, recopilará datos científicos en toda la costa chilena, incluso en aguas interiores, desde el Canal de Chacao hasta el Golfo de Penas.
El acto estuvo encabezado por el ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau, y el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Julio Salas. También estuvieron presentes en la actividad la subsecretaria de Ciencia, Carolina Gainza, el presidente de la comisión de Pesca de la Cámara, Jorge Brito, el diputado de dicha comisión Cristhian Moreira; el jefe de la Primera Zonal Naval, contraalmirante Roberto Zegers; el director de Intereses Marítimos y Medio Ambiente Acuático, contraalmirante Nelson Saavedra; y más representantes de IFOP, Sernapesca, Indespa, Subpesca y la Armada. En la instancia, por supuesto, también participó la doctora en Oceanografía, María Ángela Barbieri.
En este contexto, el ministro Grau, señaló que “tal vez una de las innovaciones más importantes que hemos hecho durante este Gobierno fue la creación del programa de Desarrollo Productivo Sostenible, donde hemos trabajado con el Ministerio de Ciencia, junto con otros ministerios, para invertir más en ciencia, tecnología, conocimiento e innovación, orientado a los desafíos que tenemos como país, desafíos ambientales, desafíos productivos. Esta embarcación justamente tiene ese elemento en su centro, la importancia de crear capacidades que nos permitan tener conocimiento científico para tomar mejores decisiones de política pública”.
Por su parte, el subsecretario Salas, enfatizó que“mientras más investigación y de mejor calidad se haga en Chile, mejores políticas públicas se pueden impulsar para el desarrollo de la actividad pesquera”y explicó que “uno de los pilares de la nueva Ley de Pesca es el reforzamiento del pilar científico en la toma de decisiones (…) que las decisiones de administración pesquera no dependan del capricho de la autoridad de turno, sino que tengan una base científica con la mejor ciencia disponible, y obviamente eso supone contar con los mejores instrumentos que permitan desarrollar esas investigaciones”.
Un ejemplo puntual de ello es que la Subpesca informa periódicamente cual es el estado de las pesquerías “y sería imposible informar sobre ello si no tuviésemos programas de investigación que nos permitan monitorear cuál es el estado de estos recursos”, añadió el subsecretario.
En tanto, la subsecretaria de Ciencia, Carolina Gainza, relevó el privilegio de tener la costa que tiene este país, un “laboratorio navegable” por lo que se necesita “seguir desarrollando este tipo de embarcaciones de investigación porque tenemos una gran costa (…) Esta investigación no solamente tiene que mirar qué es lo que podemos hacer con ella en términos de recursos productivos, sino que también cómo lo cuidamos. La investigación que se desarrolla en este barco tiene esa mirada de la sostenibilidad del mar”.
Investigación de alto nivel
La Dra. María Ángela Barbieri tuvo palabras para destacar que Chile es parte del gran ecosistema de Humboldt, uno de los más prósperos del mundo, y que en tiempos de cambio climático “tener un barco como éste, donde podamos ver todo lo que ocurre desde la superficie hasta el fondo del mar, vemos los recursos que hay, el fitoplancton, el zooplancton, todos los peces, pero también toda la variable ambiental, y con un sistema de procesamiento y adquisición de la información que nos permite hacer un trabajo prácticamente en tiempo real, es una maravilla”.
El «Dra. Barbieri» fue construido en Valdivia por el astillero ASENAV alcanzando 30,8 metros de largo (eslora), 9 metros de ancho (manga) y mide hasta 3,9 metros de alto (puntal). Una de sus principales características es su calado de 3 metros. Por ello, se convierte en una embarcación científica capaz de navegar en aguas de baja profundidad en toda la costa del país.
Este buque, cuyo primer viaje será en mayo para investigación de crustáceos, será operado por el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) y cuenta con capacidad para alojar a ocho científicos y once tripulantes. Además, posee un sistema que disminuye el ruido irradiado al agua, para evitar interferir con el hábitat marino. Asimismo, dado que su sistema de propulsión es diésel-eléctrico, genera menos emisiones, por lo tanto, es más amigable con el medioambiente.
Frente a este desafío, el director de IFOP, Gonzalo Pereira, destacó que la embarcación -que se suma al buque “Abate Molina”- representa un avance “tanto como recursos como investigación oceanográfica y el medioambiente” y que asumieron “el desafío de ser los operadores del buque con gran satisfacción y responsabilidad” para lo cual se han estado capacitando con funcionarios de Subpesca. En esa línea, Pereira destacó que la tripulación del Barbieri será un “buen equilibrio entre experiencia y juventud” al considerar un capitán de experimentada trayectoria y una primer piloto mujer, así como estudiantes egresados de escuelas de tripulación de Valparaíso tras un convenio que mantienen con el propósito de potenciar profesiones vinculadas al mar.