Parque Nacional Archipiélago de Juan Fernández: 88 años de protección a especies únicas en el mundo

Un referente ecológico a escala global, el Parque Nacional Archipiélago de Juan Fernández cumplió 88 años de existencia. Creado el 16 de enero de 1935, este entorno protegido posee una superficie de más de 9 mil 500 hectáreas, correspondientes a las islas Santa Clara, Alejandro Selkirk  y la mayor parte de Robinson Crusoe.

Debido a la gran cantidad de especies endémicas que alberga, la unidad fue declarada Reserva de la Biósfera por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en el año 1977. 

Este “hotspot” de la biodiversidad brinda resguardo a especies como el lobo fino de Juan Fernández (Arctocephalus philippi), mamífero endémico, cuya población gira en torno a los 80.000 ejemplares. También acoge al picaflor de Juan Fernández (Sephanoides fernandensis), ave que se encuentra en peligro de extinción, con alrededor de 800 individuos registrados.

Asimismo, en el lugar confluyen  230 tipos de plantas nativas y 137 endémicas, en constante amenaza producto de la introducción de especies exóticas invasoras como el maqui, la murtilla y la zarzamora.

“Los esfuerzos de nuestro personal guardaparques, el Ministerio de Medio Ambiente, el municipio y organizaciones no gubernamentales, como Island Conservation y Oikonos, se concentran en el control de especies exóticas invasoras, animales y vegetales, que degradan el territorio y ponen en riesgo a la biodiversidad única en el mundo del archipiélago”, manifestó el director regional de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Luis Correa.  

Subrayó que “como institución a cargo de la administración del parque, trabajamos fuertemente en la educación ambiental de la comunidad, para evitar la introducción de especies exóticas invasoras, la corta ilegal de ejemplares arbóreos y la ocurrencia de incendios forestales, incluso, con la implementación de una brigada de prevención respuesta (denominada chonta, como la palma endémica de la zona)”.

Correa agregó que guardaparques “realizan colectas de semillas de plantas nativas y endémicas, que luego viverizan y propagan en el archipiélago. Una tarea difícil, que implica largas excursiones por terrenos empinados y alejados del poblado. Así, por ejemplo, redescubrieron dos especies que se creían extintas en la zona: Chenopodium nesodendrum y Robinsonia berteroi”.

 

Ver además

Crean murales gemelos que interconectan la historia de Valparaíso y Rapa Nui con la astronomía

¿Qué tienen en común las historias de Valparaíso y Rapa Nui y su relación con …