Este miércoles 19 de abril se realizará en todo el país el Censo 2017, conteo y caracterización de todas las viviendas y habitantes del territorio nacional que permite obtener la información necesaria para el diseño e implementación de políticas públicas, proyecciones de población y muestras necesarias para la construcción de indicadores fundamentales del país.
La Pontificia Universidad Católica de Valparaíso no quiso estar ajena a esta importante instancia nacional, y dando cuenta una vez más de su profunda vocación pública, convocó a más de 1.700 miembros de la comunidad universitaria (estudiantes, académicos y funcionarios) para participar del Censo. Además, para apoyar el proceso en distintas zonas, puso a disposición el Campus Sausalito (Santa Inés), a cargo del Instituto de Estadística; y el Campus Curauma (Curauma y Placilla), a cargo de la Dirección de Asuntos Estudiantiles de la Vicerrectoría Académica; mientras que el Instituto de Geografía asumirá la organización de un local ubicado en Laguna Verde.
Asimismo, para el reclutamiento y aplicación del Censo, se ha contado con la activa colaboración de las Escuelas de Arquitectura y Diseño, de Comercio, de Trabajo Social, de Ingeniería Industrial, de Educación Física y de la Escuela de Ingeniería en Construcción, quienes se han involucrado en esta convocatoria desde distintas asignaturas.
Este trabajo por parte de la Universidad no solo contempla la convocatoria de voluntarios y disponer de las sedes institucionales. Así lo explica el director de Asuntos Estudiantiles, David Letelier, quien comenta que “la organización de cada sede a cargo de la Universidad considera un jefe de local, supervisores, jefes de zona, censistas, digitadores y apoyos, hay una estructura administrativa para operar en el Censo que es bastante compleja y que está a cargo de la PUCV en cada uno de esos espacios”.
“Estamos comprometidos en un proceso a nivel país que se relaciona con las próximas políticas públicas que van a devenir de los datos que se obtengan. Se ha cumplido largamente con los 500 voluntarios solicitados inicialmente a las universidades, sin embargo nuestra institución se autoimpuso un esfuerzo comparativamente mayor basado en el rol público que ha mostrado desde su fundación. Hay evidencia de un sentir institucional que considera un involucramiento permanente con los requerimientos del país”, añade Letelier.
La profesora Pamela Wilson, coordinadora del Campus Sausalito, en representación del Instituto de Estadística, destaca el alto nivel de compromiso demostrado por los alumnos, quienes han participado en reconocimientos en terreno y capacitaciones sin dejar de lado sus responsabilidades académicas.
“Hay una contribución de la Universidad a nivel de país, que también lo entendieron nuestros alumnos. Creo que cuando hay algo de estas características, cuando estás representando a la Universidad y aportando un granito de arena al país, hay que jugártela por que salga de la mejor manera posible. Yo creo que un rol importante de la PUCV es participar, estamos en Valparaíso y la Universidad está haciendo un aporte a la región”, menciona.
En el caso de la sede de Laguna Verde, a cargo del Instituto de Geografía y que contará con el apoyo específico de la Escuela de Arquitectura y Diseño, los voluntarios han asistido a planificaciones en terreno para que los censistas lleguen a sus zonas delimitadas, en particular los sectores rurales y algunas áreas urbanas que son complejas de identificar. Por lo mismo, se solicitó el trabajo conjunto con censistas y supervisores locales, pues ellos tienen un mejor conocimiento de la zona, sobre todo de las áreas rurales.
“Nuestra Unidad Académica sabe la importancia que posee el instrumento del Censo, no solo para realizar planificación y políticas públicas, sino que también para poder hacer investigación científica, para ejercer el rol profesional del geógrafo. Es una responsabilidad tanto profesional como ética por parte nuestra el apoyar en el Censo, dadas las implicancias que tiene para las perspectivas de desarrollo de las personas, los territorios y el país”, expresó el académico Rodrigo Figueroa, coordinador de la sede Laguna Verde.
Ésta no es la primera vez que la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso muestra una activa colaboración en acciones voluntarias. Ya lo ha demostrado en numerosas oportunidades, como ocurrió tras el megaincendio de Valparaíso, y en 2010 después del terremoto. Se trata de un sello distintivo de los estudiantes, académicos y funcionarios de la PUCV que adhieren permanentemente a las distintas convocatorias de voluntariado y a una especial preocupación por el entorno próximo en el que se desenvuelven.