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La esperada y tan necesaria lluvia también trae consigo algunos problemas; uno de ellos, es el mal estado en que quedan las calles de tierra y el aumento de baches en el pavimento. Si bien, en Quilpué cada vez son menos las calles no pavimentadas, aquellas que existen, principalmente en sectores rurales, deben ser intervenidas como parte de un programa integral que aplica el Departamento de Operaciones de la Municipalidad después de un sistema frontal. Así lo explica Cristián Cáceres, director de Operaciones del Municipio de Quilpué.
“Una vez terminado el sistema frontal, el municipio, desde operaciones, desarrolla tres grandes líneas de acción: la primera, en relación a la asistencia a cada una de las situaciones de emergencia registradas durante el temporal y que afectó directamente a las personas; la segunda línea de acción, dice relación con bacheos de calles de hormigón y asfalto; la tercera línea de acción, es el arreglo y mejoramiento de calles de tierra que aún persisten en la comuna. Recordar que el porcentaje de calles de tierra de la comuna cada vez va disminuyendo, pero van quedando algunas calles que por diversos motivos no se han abordado en proyectos de pavimentación.”
En relación a las calles de tierra, existe una lista con fechas programadas para la intervención. En primer lugar, se arreglan aquellas vías que se utilizan para el transporte de agua potable en camiones aljibe, lo que ocurre principalmente en áreas rurales. Cáceres, explica que el tiempo que transcurre desde el término del sistema frontal y el emparejamiento de la calle, se planifica para que el trabajo quede debidamente hecho y tenga una mayor duración.
“El municipio cuenta con una máquina motoniveladora que se dedica a hacer el arreglo de las calles de tierra. La programación abarca alrededor de 15 a 20 días, siempre dependiendo de la evaluación y comportamiento de cada una, ya que hay que esperar los tiempos de secado natural y de compactación del suelo, ya que, si uno aplica la máquina inmediatamente al día siguiente, se produce luego un barrial mayor, hundimiento y profundización de huellas de los vehículos, lo que va a entorpecer la circulación y estropear el arreglo realizado, por eso cada calle tiene un proceso distinto para ser intervenida.”
La limpieza de calles y aceras, para ser despejadas de arena, tierra, hojas y otros elementos acumulados tras la lluvia, también está considerada en la planificación post frontal del municipio.
