A contar del 1 de abril las mascarillas volverán a ser obligatorias en los servicios de urgencia de los centros de salud públicos y privados del país debido a la activación de una Alerta Sanitaria por parte del Ministerio de Salud.
Esta medida fue tomada por el aumento de los casos de virus respiratorios como la influenza y el virus sincicial. A esto se le suma la baja adhesión a la campaña de vacunación contra el Covid-19 para grupos de riesgo.
“Respecto al tema Covid hay un cansancio en no querer más dosis, pero todavía está el virus presente”, dice Romina Pérez, directora de las carreras del Área de la Salud del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Viña del Mar. “Por muy agotados que estemos, tenemos que entusiasmar, sobre todo a los grupos de riesgo, a que se vacunen: personas mayores y personas inmunodeprimidas”.
En el caso de los virus como la influenza y el virus sincicial, se ha visto un aumento que corresponde a la estacionalidad del otoño, aunque desde el ministerio no han asegurado que estas enfermedades hayan adelantado su llegada.
“Tenemos que aprovechar la instancias de las campañas de vacunación tanto para el Covid-19 como para la influenza, que son dos vacunas distintas, pero que deben ser aplicadas en los grupos de riesgo. Algunas personas le tienen miedo a la vacuna porque dicen que se enferman, pero esta vacuna impide que, si efectivamente nos contagiamos, sea grave”, asegura Pérez.
Respecto al virus sincicial, esta semana comenzó la inmunización de lactantes y menores de seis meses con Nirsevimab en la región de Valparaíso. “Somos el primer país de Sudamérica que está accediendo a esta vacuna gratuita y que se va a empezar a aplicar en los vacunatorios. Hay mucho interés por esta vacuna, muchos padres están pidiendo que sus hijos mayores de seis meses sean vacunados”, indica la docente de Santo Tomás Viña del Mar.