A partir de las 00 horas del próximo sábado 4 de abril los habitantes del territorio nacional -a excepción de Magallanes y la Antártica chilena- deberán atrasar sus relojes en una hora, dando inicio así al horario de invierno (UTC -4), que durará cinco meses, es decir, hasta el primer sábado de septiembre 2020.
La seremi de Energía de la región de Valparaíso, Fernanda Pinochet Olave señaló “es muy importante en estos tiempos aprovechar la luz natural de la mañana, ya que va a permitir estudiar y trabajar de mejor forma a quienes lo están haciendo en sus casas, niños y adultos, mucha gente está haciendo teletrabajo, y por lo tanto, en estos tiempos que son complicados, que estamos todos preocupados pero aún así estamos llevando nuestras tareas, tratar de iniciar nuestras actividades con la luz del día”.
A lo que agregó “quiero contarles que está decisión se tomó porque hay mucho estudios en que la concentración y el desempeño en general de las personas es mucho más alta en la medida que se hace con luz natural, siendo más relevante en niños y adolescentes. Por lo que quiero invitarlos a todos a que hagamos el cambio de hora y nos levantemos con harta energía, dejando la mañana para trabajar y estudiar y así en las tardes disminuir nuestro consumo eléctrico”.
Con la entrada en vigencia del horario de invierno, se reduce prácticamente a cero los días en que el sol saldrá después de las 8 en la región de Valparaíso.
Cabe destacar que la evidencia científica ha demostrado que iniciar las actividades diarias sin luz natural tiene un efecto negativo sobre la salud, la concentración y el desempeño de las personas, especialmente en niños y adolescentes, quienes por su ciclo biológico de crecimiento despiertan naturalmente más tarde que los adultos, y requieren de luz natural para un mejor aprendizaje.
El régimen actual de cinco meses de invierno (entre el primer sábado de abril y el primer sábado de septiembre), y de siete meses de verano –el resto del año- fue establecido durante 2018 después de recabar antecedentes sobre las variables energéticas, de salud y bienestar, educación, seguridad y transportes y agrícola.
El horario de invierno aplicará para todo Chile con la excepción de la Región de Magallanes y la Antártica Chilena, que mantendrá el régimen de los últimos años con el horario de verano durante todo el año, tal como lo decidió la ciudadanía en 2017.