Dr. Andrés Pizarro Jefe de la Unidad de Emergencias de Adultos Hospital Fricke

Unidad de Emergencia Adultos del Hospital Fricke reitera llamado a hacer un buen uso de la red asistencial

La Unidad de Emergencia Adultos del Hospital Dr. Gustavo Fricke atiende alrededor de 80 mil consultas anuales, considerando consultas médicas y dentales, siendo la Unidad de Emergencia de mayor envergadura y complejidad de la red asistencial del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota.

En ese contexto y, considerando la actual pandemia de coronavirus, el Dr. Andrés Pizarro, jefe de la Unidad, explica que con el fin de garantizar una atención inmediata a quienes se encuentran en riesgo vital, al ingreso a la urgencia se categoriza a cada paciente de acuerdo a su sintomatología, de manera de dar atención primero a quienes se encuentran graves y en riesgo vital.

“La población ha ido comprendiendo que las Unidades de Emergencia de los hospitales, especialmente, las urgencias de alta resolución poseen pacientes graves y complejos que atender. Es bueno hacer un llamado a la población, para que las personas sólo acudan a la Unidad de Emergencia de alta resolución, cuando tenga una situación clínica que lo amerite, de gravedad, y prefiera otros dispositivos como consultorios y SAPUS para poder atender patologías de menor relevancia desde el punto de vista clínico, lo que permite ayudar a dar una mejor atención a los pacientes más graves”, indica el médico.

Atención de urgencias en pandemia

El llamado a utilizar de manera adecuada las urgencias es especialmente importante, dado que la Unidad de Emergencia sigue prestando un apoyo esencial en pandemia. Como dispositivo de atención de urgencia de “mayor envergadura del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota, la labor que ha cumplido ha sido vital no sólo para la gente de la comuna sino para pacientes de las comunas de la red”, indica el médico.

El jefe de la urgencia, destacó que desde el inicio de la contingencia por covid, la Unidad de Emergencia ha emprendido múltiples desafíos para dar la mejor atención. En primer lugar, se diferenció entre Unidad de Emergencia No Respiratoria y Unidad de Emergencia Respiratoria, para separar los flujos de atención y disminuir la posibilidad de contagios en su interior. Además, se reforzaron los turnos, se incorporó equipamiento para ventilación invasiva y no invasivo, toma de PCR, entre otros.

En otro hito importante para la población, las dependencias de la urgencia se trasladaron al nuevo hospital, aumentando su tamaño de 929 a 2.287 metros cuadrados, incorporando dos salas de reanimación, diez boxes de atención médica, dos para atención odontológica, y seis boxes de procedimientos, además de espacio vehicular para el ingreso de 10 ambulancias, salas de espera diferenciadas y otras innovaciones.

La capacidad de renovación ha sido importante, ejemplifica el médico, “En la segunda ola, los esfuerzos estuvieron abocados en fortalecer la atención de la emergencia respiratoria, después se reconvirtieron las unidades, y se fortaleció la Unidad de Emergencia No respiratoria, ubicada en el nuevo hospital, dado que comenzó a llegar gente que consultaba por otros motivos”.

En todo este proceso, ha merecido un especial reconocimiento “la labor de los funcionarios de esta unidad, que ha sido destacada en distintas instancias”, agrega. Y el desafío por dar una atención de calidad se mantiene, dado que las exigencias de la pandemia no se han acabado. “Se cumplió una labor importante, que aún se sigue cumpliendo todavía, en la Unidad de Emergencia Respiratoria se sigue recibiendo pacientes graves con coronavirus, y la labor en pandemia se mantiene y da realce a la importancia de lo que se ha hecho y de lo que está por hacerse”, agrega.

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