“Las varazones de peces, y de otros organismos como moluscos y crustáceos, son eventos que ocurren normalmente en los periodos estivales, en algunos sectores de la costa de Chile. En el verano del 2015 se produjeron varios eventos de esta naturaleza en el litoral de la Región del Bío Bío. En esa oportunidad vararon principalmente sardinas, lo que según los antecedentes que manejamos habría estado asociado al levantamiento del límite superior de la zona mínima de oxígeno durante el periodo de mayor afloramiento de aguas del fondo marino o surgencia, patrón anual típico de la zona frente a Concepción”, así lo manifestó Leonardo Núñez, biólogo marino y Director Ejecutivo del Instituto de Fomento Pesquero.
Esta especie habita en profundidades que no sobrepasan los 50 metros en el día y entre 5 y 15 metros en la noche. Según la información que disponemos de los muestreos de oxígeno y temperatura de la columna de agua hechos por la Gobernación Marítima de Valdivia el 23 de marzo, que encontraron valores bajos de oxígeno y temperatura entre 10 y 15 metros de profundidad, representa un antecedente que debería ser considerado como relevante. Al igual que el año pasado en las costas del Bío Bío, los cardúmenes de sardina habrían sido sometidos a condiciones no favorables, representando una causa probable de su mortandad masiva.
Igualmente, investigaciones publicadas sobre estos fenómenos han señalado otras causas, como las enfermedades por contaminación causada por el hombre, proliferación de algas nocivas, falta de alimento, u otras variaciones físico-químicas de las masas de agua. “El Instituto se encuentra investigando todas estas causas probables, para lo cual constituyó un equipo en terreno para tomar muestras de los ejemplares varados, y ya los enviamos a los laboratorios de una Universidad de la zona a objeto de establecer las causas probables de este fenómeno” comentó el Director de IFOP. “El equipo que constituimos en terreno observó 4 especies varadas, de las cuales el 96% correspondió sardina común (Strangomera bentincki) y el restante a anchoveta (Engraulis ringens), róbalo (Eleginops maclovinus) y pejerrey (Odontesthes regia), lo cual ya nos dice que este fenómeno no es uno específico de la sardina común. Estamos a la espera de esos resultados y analizaremos otros antecedentes que estamos recabando, para establecer con la mayor precisión la posible la causa.
Estos fenómenos de mortandad masiva de peces, deben ser abordados en el más amplio enfoque, para definir sus causas probables y es prudente no adelantar conclusiones apresuradas sobre el estado del recurso Sardina, a partir de estos eventos infrecuentes Finalizó Núñez.